La especialidad del Virgen de las Nieves que cuenta con las mejores MIR de España
Trinidad, elegida como la más destacada de cuarto año, y Sofía, número uno en el último examen, se forman en Dermatología, uno de los servicios más demandados
Cuando Trinidad Montero estudiaba Medicina, se solía fijar en las lesiones en la piel de la gente con la que se cruzaba por la calle. Alopecia frontal fibrosante, psoriasis… No podía evitar diagnosticarlos en silencio. Su madre se reía de aquella pasión que podía marcar su futuro. Y así fue. Tras un excelente examen, eligió Dermatología para realizar su residencia, un periodo en el que ha demostrado que a trabajadora no le gana nadie. Este esfuerzo le acaba de ser reconocido con un doble premio: mejor Médico Interno Residente (MIR) de España, concedido por Sanitas y avalado por el Ministerio de Sanidad y el de Educación; y mejor expediente MIR de Andalucía, otorgado por el Colegio de Médicos de la comunidad. Da la casualidad de que Trinidad ha coincidido trabajando con Sofía Haselgruber, quien fue número uno de España en el último examen MIR. La suerte de tenerlas en su plantilla la tiene el Hospital Virgen de las Nieves, concretamente el servicio de Dermatología. Allí se entregan en cuerpo y alma las mejores residentes de España.
Noticia Relacionada
«Es un orgullo, estimula a seguir trabajando y mantener ese nivel»
Trinidad, jienense de 29 años, eligió estudiar Medicina buscando una profesión «que contribuyese a mejorar la sociedad». La Universidad de Granada (UGR) fue donde arrancó esta exitosa carrera. Tras superar con creces el examen MIR, cuando tuvo que elegir especialidad visitó varios servicios de hospitales. El del Virgen de las Nieves fue el que más le convenció. «Fueron muy cariñosos, desde que hablé con ellos supe que quería estar aquí», asegura. En aquel momento no podía imaginar que al finalizar esa preciosa etapa sería doblemente premiada. «Siempre he sido constante, pero muchas veces todos los esfuerzos no son reconocidos. Es una satisfacción muy importante que reconozcan tantas horas de trabajo», apostilla.
En estos cuatro años ha sido una esponja, absorbiendo todos los conocimientos posibles. «He aprendido Dermatología, investigación y cómo tratar mejor a mis pacientes, pero también he disfrutado de mis compañeros, familia y amigos», confirma a modo balance. Tras acabar la residencia, que dura cuatro años, ha conseguido seguir trabajando en el mismo área gracias a un contrato Río Hortega del centro del Instituto de Salud Carlos III. Durante los próximos dos años podrá combinar la clínica con la investigación, una de sus pasiones. «Estamos trabajando en medicina predictiva y personalizada, cómo medir parámetros de manera no invasiva en la piel podrían predecir la respuesta a diferentes tratamientos», explica Trinidad, responsable de la consulta de dermatitis atópica.
Encantada con Granada
De Galicia a Granada para formarse en un servicio referente a nivel nacional. Fue la elección de Sofía Haselgruber, de 24 años, tras quedar en primera posición del examen MIR este año. En aquel momento le llovieron las felicitaciones y la entrevistas, rompiendo temporalmente su tranquila vida en Santiago de Compostela. «Fue un boom, pero pasó y volví a ser yo», bromea la joven. Empezó la residencia en junio y, tras unos meses «muy bonitos», afirma que la experiencia está superando con creces sus expectativas.
Después de rotar en los servicios de Medicina Interna y Enfermedades Infecciosas, hace mes y medio aterrizó en Dermatología. Eligió esta especialidad porque, además de las consultas, tiene una parte quirúrgica que rompe su rutina y la mantiene bien despierta. «Elegí Granada porque me convenció el hospital cuando vine a hablar con adjuntos y residentes, me encantó el ambiente y lo que me transmitieron. También me gustó mucho cómo se vive aquí, tener la playa y la montaña cerca, por ejemplo», asevera.
De cara a los cuatro años que tiene por delante, Sofía aspira «a ser buen médico, manejar de la mejor forma posible a los pacientes y operar bien». «Quiero salir formada como para enfrentarme correctamente a una consulta yo sola sin el apoyo de los tutores», resalta. Trabajar con Trinidad es una motivación para ella, consciente de todo lo que se puede lograr con el trabajo duro. Sin duda, estas dos talentosas mujeres dejarán huella en el servicio de Dermatología del Virgen de las Nieves.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión