Revientan un piso de lujo en Granada que usaban okupas para la 'maría'

En gran parte de los casos, cuando ejecutan el lanzamiento y acceden a las viviendas okupadas con orden judicial, se encuentran que las destinan al cultivo de marihuana.

Dentro de este proceso de recuperación del patrimonio público llamó poderosamente la atención la vivienda que desalojaron el 12 de agosto, un segundo piso de la calle Joaquina Eguaras, que escondía lujo y macetas de droga, todo en un mismo espacio. Después de un año de papeleo y de manera sorpresiva, aunque el afectado tenía recurrido el lanzamiento –algo que no impide que se desaloje, informan desde AVRA– la Policía y los técnicos de la agencia pública propietaria de la vivienda, entraron en el piso y lo cerraron a cal y canto con la ayuda del cerrajero y de una puerta metálica antivandálica. El inmueble quedaba sellado a la espera de ser reparado y adjudicado a una familia.

Este proceso se demorará algo más porque alguien ha entrado al piso con una patada en la puerta (en este caso han tenido que arrancarla) y ha destrozado todo, incluidas tomas de luz y enchufes y hasta «han picado los azulejos para que sean inservibles», exponen fuentes de la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía.

Todo el lujo que encontraron en agosto cuando desalojaron se lo han encontrado arrancado de cuajo cuando los técnicos de AVRA volvieron a entrar el 30 de octubre. Cuando se produjo el alzamiento el inmueble causó la sorpresa de todos. Salón y cocina con barra americana unidos. Taburetes blancos, un sofá largo y caro, muebles de una conocida marca internacional y la pared empedrada con una tele inmensa colgada y dos videoconsolas. En el techo, pladur con luces de colores y en los armarios de la cocina restos de copas. En la nevera, casi sin estrenar, tónica y ningún resto de comida más. Además de un moderno baño, el inmueble lo completan los tres dormitorios que estaban dedicados al cultivo de la 'maría'. A nadie dejó indiferente este espacio dedicado al ocio y a las plantaciones de droga a la vez.

Prácticamente del mismo tamaño, la instalación era igual en todas: macetas negras con las plantas creciendo en dirección a un techo del que colgaban multitud de focos de luz halógena. Un dispositivo que evidentemente requería de un 'enganche' ilegal a la red de eléctrica que técnicos de Endesa acabaron cortando cuando llegó el momento. En total, criaban 250 plantas.

Desde la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía en Granada han puesto una denuncia en Policía Nacional ante los destrozos descubiertos a finales de octubre. Los agentes se encargan ahora de recopilar huellas para localizar a los causantes de este destrozo del patrimonio público. «No solo no se podían hacer las obras que ejecutaron en una vivienda y cuando se deja tampoco se pueden ocasionar daños», apuntan desde AVRA, que indican que ahora habrá que localizar al autor de estos daños ya que los vecinos desconocen quién ha podido causarlos. Reparar esta vivienda para otra familia costará más de 13.000 euros, que se invertirán para dejarla habitable después de que haya pasado este 'huracán' arrasándolo todo y reventando la puerta de chapa antivandálica.

«No sólo ocupan la vivienda ilegalmente, sino que las destinan al cultivo de marihuana y cuando se ejecuta el auto de lanzamiento para recuperar la vivienda y ponerla a disposición de una familia que cumple todos los requisitos legales, nos encontramos con estos destrozos, impidiendo que otra familia pueda acceder a ella y el coste adicional que supone para las arcas públicas, pagado con el dinero de los impuestos de todos los ciudadanos», apunta Juan Cobo, gerente de AVRAen Granada, que entiende que, aunque requiera de trabajo y sea un proceso duro, la Agencia debe recuperar todos sus inmuebles para ponerlos a disposición de las personas que, por falta de recursos, no pueden acceder a una vivienda y necesitan un lugar para sus familias.