Reencuentro de Titos de toda España en Guadahortuna
«Nos interesa que se conozca que existimos y que tenemos interés por conocer a más Titos», afirma uno de los organizadores
ANTONIO ARENAS
GUADAHORTUNA
Lunes, 26 de marzo 2018, 01:35
El sábado, la localidad de Guadahortuna fue testigo del segundo encuentro nacional de personas con el apellido Titos. A la segunda convocatoria -la primera fue ... en Píñar, el 30 de abril pasado- volvieron a concentrarse casi un centenar que disfrutaron de una excelente jornada con los actos programados que incluían una visita guiada por el catedrático de la UGR, Manuel Titos, de la Iglesia de Santa María la Mayor y del Puente del Hacho. Después se concentrarían en el restaurante Leyvamar para la comida en cuyo transcurso hubo tiempo para charlar y ver las fotos e imágenes expuestas, el árbol genealógico de los Titos cada vez con más ramas y para entregar a los asistentes el cuadernillo titulado 'Breve historia de los Titos y los carros. De Campillo de Arenas a Guadahortuna', firmado por Antonio Titos Olmos y Puri Titos Galián, impulsores de este segundo encuentro.
Tal y como estaba previsto, en torno a las 11 de la mañana se fueron concentrando los participantes, en torno a la parroquia. Entre ellos, Manuel Titos Martínez, quien contó que a mitad de los años 20 del siglo pasado su abuelo, José Titos Román, emigró a Guadahortuna con todos sus hijos e inició una saga de Titos que se ganaba la vida con la construcción de carros que afortunadamente aún pervive en uno de sus sobrinos nietos propietario de Remolques Titos.
Pese al fuerte viento, los Titos y sus acompañantes no desistieron de la visita al Puente del Hacho aunque sí hizo que fuese más breve de lo previsto. De él nos contó que se trata del puente más largo de ferrocarril construido en España en el siglo XIX con una longitud de 700 metros, de un solo ojo que en su parte más elevada alcanza los 60 metros.
Por su parte, Antonio Titos habló de los primeros Titos de Guadahortuna y de la imagen retrospectiva de esas vivencias que nada tienen que ver con la realidad actual, «por las personas y objetos que han desaparecido». Este se mostraba muy satisfecho con la respuesta de este año, en especial por la presencia de media docena de niños, pues el objetivo era «hablar entre los Titos, conocer nuestras familias, nuestro pasado y es lo que estamos haciendo ahora y estamos tan emocionados que la gente ya tiene ganas de que pase un año para volvernos a encontrar otra vez».
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