La tasa de La Calahorra continúa por encima de 3.000: «Los números asustan pero hay menos miedo»

Llevan en esa situación prácticamente desde la Navidad, cuando los positivos por covid comenzaron a aparecer. En la actualidad, la última actualización de datos ofrecida por la Junta de Andalucía notifica de 21 positivos en las dos últimas semanas entre sus 668 vecinos. «Estamos viviendo esta sexta ola como en cualquier otro lugar. La preocupación es menor que otras veces y hay menos miedo», explica a IDEAL Alejandro Ramírez, alcalde de La Calahorra, que reconoce que cuando antes había un positivo «la gente se ponía muy nerviosa», algo que no ocurre ahora. «El principal problema es la relajación pero aunque los números asusten los casos son más leves».

El primer edil cuenta que no se explican el origen de los contagios, ya que todos parecen haberse producido por cuestiones diferentes: visitas de familiares, contactos con conocidos, en el trabajo, por viajes… Sin embargo, pese a que percibe una mayor relajación, la gente continúa cumpliendo con las recomendaciones sanitarias y todo continúa «bajo control». «Aunque el nerviosismo no sea tan grande mantengo la preocupación. No podemos relajarnos porque el peligro sigue estando ahí», dice Ramírez.

Sobre la situación del centro de salud, que está sufriendo también esta sexta ola con una elevada saturación, explica que «hay que ser conscientes de que estamos en una pandemia y la carga de trabajo es enorme», pero asegura que «eso no quita que estén actuado lo mejor que pueden con una labor maravillosa». Asimismo, detalla que la vacunación continúa a buen ritmo en La Calahorra, ya que todo el mundo tiene claro que son las vacunas las que permiten que esta sexta ola esté siendo «más llevadera».

Por otro lado, el alcalde no cree que hagan falta más restricciones para limitar los contagios. «Si no nos mata el bicho, nos va a matar le hambre», apunta. Aunque sí que reconoce que aspectos como el control de los contagios y un mayor seguimiento a esos casos y su entorno habría podido ser clave para evitar que los contagios continuaran subiendo. Para finalizar, anima a todo el mundo a mantener la cautela: «Debemos ser conscientes de que la situación sigue siendo muy delicada. No hace falta caer en la paranoia y estar encerrados, pero hay que actuar con prudencia».