La muerte de la motorista de Huétor Vega, repartidora de una conocida pizzería, «fue un accidente laboral»

Según han informado los sindicatos, la moto donde iba la víctima impactó con un coche en el trayecto del trabajo a su domicilio particular, lo que la dejó malherida de gravedad y falleció horas más tarde en el Hospital de Traumatología.

Aunque en principio se va considerar accidente laboral grave a efectos oficiales, puesto que el fallecimiento no se produjo en el mismo momento del accidente, para ambos sindicatos sí tendría la calificación de accidente laboral mortal 'in itinere'.

Alejandro García, responsable del sector de Hostelería de CCOO Granada, ha lamentado el fallecimiento de la trabajadora y ha trasladado el pésame a la familia.

El dirigente sindical ha señalado que este accidente es otra muestra más de la precariedad que impera en el sector de Hostelería, con turnos de trabajo «extenuantes», que propician el agotamiento físico y mental de la plantilla del sector.

Por parte de CCOO se va a trasladar a la empresa, desde el comité de empresa, la revisión de los horarios y turnos de trabajo, así como que se incorpore la movilidad «in itinere» y la accesibilidad al centro de trabajo en la evaluación de riesgos laborales.

García ha destacado la necesidad de establecer medidas encaminadas hacia una movilidad sostenible y compartida, que fomente la reducción de la utilización del vehículo privado con la consiguiente mejora para la seguridad vial.

Por su parte, tras lamentar el fallecimiento de la trabajadora y expresar su pésame a la familia y personas allegadas, Miguel Ángel Prieto, responsable del sector de Hostelería de la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de la UGT Granada, ha considerado que es preciso que en las mesas de negociación de los convenios colectivos se incluyan cláusulas específicas acerca de la seguridad vial.

También del transporte hacía y desde el trabajo ya que, ha indicado, los accidentes «in itinere» van creciendo debido no sólo a la falta de implicación de las empresas en materia de prevención, sino también al aumento de la temporalidad en la contratación de los trabajadores, que impide que estos tengan una formación adecuada en cómo prevenir y evitar los riesgos laborales.

«Es muy triste que una persona salga de su casa para ir al trabajo o viceversa y ya no regrese», ha dicho Prieto, para quien tanto las empresas como las administraciones deben implicarse para buscar soluciones a un problema que sigue aumentando año tras año, en una paulatina y gradual línea de ascenso.