El sacerdote que mejora y abre los templos para potenciar el turismo religioso en la Alpujarra

En Soportújar, los técnicos municipales y del Arzobispado de Granada han coincidido en el mismo diagnóstico y planteamiento para terminar con los resquebrajamientos y las grietas que se producen en la iglesia del siglo XVI consagrada a Santa María la Mayor. Las obras de reparación comenzarán en breve plazo de tiempo.

También, se va a reparar la ermita de Fondales consagrada a Nuestra Señora del Rosario. Las obras de renovación estructural y eliminación de goteras, presupuestadas en 13.000 euros, que ya se han conseguido, comenzarán muy pronto. Asimismo, se repararán los campanarios de las iglesias de Ferreirola, Capileira y Pampaneira, consagradas a la Santa Cruz, Nuestra Señora de la Cabeza y la Santa Cruz, respectivamente.

Además, y entre otras cosas, con un presupuesto de 5.700 euros que se abonará a lo largo de este año, se han arreglado los yugos de las campanas de la torre de la iglesia de Pampaneira. El campanario de la iglesia de Bubión, consagrada a Nuestra Señora del Rosario, tardará más en repararse por que tiene más problemas estructurales, según ha indicado Alfonso Aguilar.

Alfonso Aguilar ha elaborado también una guía en español e inglés de las tres iglesias del Barranco de Poqueira. También, con la ayuda de algunos voluntarios, ha abierto las puertas de las iglesias durante varias horas para que puedan ser visitadas todos los días por los vecinos, turistas y visitantes. Además, ha organizado peregrinaciones a León, Motril y Granada capital. La próxima peregrinación, en verano, la realizará también con gente de la Alpujarra a Caravaca de la Cruz.

Alfonso Aguilar ha publicado más de un centenar de artículos en revistas especializadas de España, Italia e Inglaterra. Ha publicado y coordinado un ramillete de libros, uno de ellos titulado Juan Pablo II, fotos de un alma. Este incansable sacerdote ha sido profesor de Filosofía en Nueva York y Roma y ha impartido cursos y conferencias en 15 países de Europa, América y Asia. Actualmente imparte clases de Filosofía dos veces a la semana en Granada capital. Este pastor de la iglesia transmite calidez, alegría y cercanía. Basta mirarle a sus ojos para descubrir la bondad de su mirada. Alfonso es un hombre sólidamente bueno y un gran siervo de Dios.