Rules se convierte en prioridad para la Junta en sus peticiones a Rajoy para el plan Juncker

Uno de los principales, por el tiempo que lleva reclamándose y porque resulta incomprensible que no se haya ejecutado aún, es el de las conducciones de la Presa de Rules, una magna construcción que mantiene embalsados litros y litros de agua sin poder distribuirlos a ninguna parte de la Costa Tropical por carecer de canalizaciones para ello.

La vieja reclamación de los agricultores de la comarca, que recientemente se han movilizado para exigir su ejecución, es una de las prioridades que ha incluido la Junta de Andalucía en su lista de peticiones a Rajoy en el apartado de inversiones de competencia estatal. Susana Díaz solicitará 220 millones del plan Juncker para destinarlos a concluir la última fase de la única infraestructura hídrica de la Costa, según el resumen ofrecido por la Oficina del Portavoz del Gobierno andaluz.

El denominado plan Juncker lleva el nombre del presidente de la Comisión Europea y se trata de un entramado de inversión de 300.000 millones de euros en tres años, un estímulo con relativamente poco dinero público y buenas dosis de ingeniería financiera. Bruselas ha diseñado un fondo con 16.000 millones procedentes de los presupuestos europeos -de los cuales 2.000 millones son dinero nuevo y el resto reasignaciones de otras partidas- y 5.000 millones del Banco Europeo de Inversiones (BEI) como palanca para alcanzar 300.000 millones con apoyo privado.

1.674 millones

Pero no solo Rules está en la agenda de la cita de este lunes. La provincia de Granada, sin ser una de las que más se beneficia de las peticiones de Susana Díaz, recibiría, en caso de obtener el visto bueno del Gobierno central y de la Unión Europea, un buen pellizco de inversión de los 1.674 millones que Andalucía reclama para el desdoblamiento de la actual N-432 y se reconversión en A-81, que mutará la vieja carretera Granada-Badajoz en autovía. Es otro de los proyectos cuya actuación corresponde al Estado, al que se une también el tramo Atarfe-Pinos Puente de la GR-43, una autovía que se encuentra en 'punto muerto' desde hace varios años porque el Ministerio de Fomento nunca la ha considerado prioritaria y que es el inicio de la A-81. La Junta incluye en su lista 494 millones para acometer las 9,4 kilómetros de una vía que llegó a ser adjudicada en 2008 por 103,4 millones de euros a la empresa Ucop. El Estado ya incluyó pequeñas partidas para su impulso en los tres últimos presupuestos generales. En el más reciente, el que se ejecutará 2015, se recogen 6,93 millones para este tramo.

La A-81, o autovía Badajoz-Granada, pasó de ser una gran demanda de las provincias cuyo suelo atravesaría -Granada, Jaén Córdoba y Badajoz- a un proyecto en un cajón. Desde 2002, políticos de diferentes partidos han exigido la conversión en autovía de la N-432. La Diputación de Córdoba aprobó en 2003, de forma unánime, una moción en este sentido. Días antes, los presidentes de las diputaciones de Córdoba, Jaén, Granada y Badajoz reivindicaron esta inversión y aprobaron un documento en el que instaban al Ministerio de Fomento a iniciar el proyecto lo antes posible. Los plenos municipales también se sumaron a la iniciativa. Entonces las instituciones esgrimían razones de seguridad, debido a la densidad de tráfico, y el hecho de que sería un eje de comercialización fundamental, no solo entre las cuatro provincias que atraviesa, sino también por su conexión con Portugal.

Sin embargo, todo varió en junio del 2011. Un informe interno del Ministerio de Fomento recomendó descartar su conversión en autovía por el insuficiente tránsito de vehículos y por previsibles problemas medioambientales. Fomento recomendó entonces reconvertir en autovía de bajo impacto ambiental solo los tramos que registran una alta densidad de vehículos y que son los accesos a grandes ciudades. El resto, más del 90%, seguiría como carretera de doble sentido. Pese a ello, hace dos años el ministerio que dirige Ana Pastor anunció que en el horizonte del 2024 se contemplaba la construcción de la A-81. Hasta ahí se puede leer.

Baza-Albox

Otra de las carreteras que tocan suelo granadino y para la que Susana Díaz pedirá inversión es la denominada Autovía de Almanzora, en concreto, para el tramo Albox-Baza. Esta infraestructura mejora la conexión entre Baza (A-92 norte) y Huércal-Overa (A-7) a través de la carretera A-334. Tiene una longitud de 84 kilómetros y la inversión total asciende 425 millones de euros, de los cuales solo se han ejecutado alrededor de 100 millones. En servicio hay actualmente dos tramos y la variantes de Albox. La Junta ha unido esta petición en un bloque de inversiones que incorpora también la Autovía del Olivar y varias nuevas variantes de carreteras, entre las que se incluye la de Valderrubio. Solicita para todo 278,7 millones y se compromete a invertir 153,7 millones en tres años.

Al margen de esto, Susana Díaz reclamará también la finalización de la A-7 (no pide inversión) y dinero para la plataforma multimodal de aglomeración urbana de Granada, para la rehabilitación del Museo arqueológico de la capital, para el Archivo Histórico y para la mejora de riegos en Castril. La lista contiene 669 proyectos para Andalucía.