Presentan una enmienda a la totalidad del Plan de la Vega de Granada

Tras haber analizado y estudiado los documentos de Aprobación Inicial del Plan Especial de Ordenación de la Vega publicados por la Junta en noviembre de 2017, el colectivo convocó el pasado viernes una sesión para trabajar con los colectivos y entidades que defienden la Vega las alegaciones a dicho plan, cuya fase de información pública finalizó ayer miércoles.

Las plataformas ciudadanas y organizaciones, que han ofrecido este jueves una rueda de prensa, establecieron las bases de una alegación conjunta en forma de manifiesto al que han llamado "Enmienda a la totalidad" y que se posicionan ante el Plan de protección de la Vega.

El manifiesto, a pesar de recoger que el plan pretende dar respuesta a uno de los puntos principales del Pacto por la Vega firmado en 2015, no reconoce este "como suyo" ya que, tras haber participado con sus aportaciones, sostiene que las de mayor calado han sido "descartadas" y no aparecen ni como recomendaciones.

"Creemos que el plan nace con muy escasas pretensiones y con poca capacidad para abordar los problemas reales de fondo que tiene actualmente la Vega de Granada", señala el manifiesto, que reconoce algunas virtudes en materia de protección aunque advierte de que puede tener "muy poco recorrido" y que en algunos casos podría ser incluso más perjudicial que beneficioso.

En este sentido, indica que consolida el modelo urbanístico del Plan de Ordenación del Territorio de la Aglomeración Urbana de Granada (Potaug) y trasmite una visión de la Vega "más cercana a un parque de uso público que a un espacio agrario".

Además de registrar como alegaciones nuevamente todas las propuestas que han ido haciendo durante los dos años de desarrollo y redacción del plan, resume sus consideraciones esenciales y básicas en la necesidad manifiesta de abrir un proceso de revisión, actualización o renovación completa del Potaug.

También en que este instrumento de ordenación urbanística es manifiestamente insuficiente para abordar con garantía de éxito los problemas que tiene la Vega de Granada, y que debe aprovecharse todo lo trabajado para el plan como punto de partida para un proceso participativo reglado destinado a la actualización del referido Potaug.

La finalidad es que en la Vega se garantice una actividad agraria "moderna, competitiva y sostenible" con protagonismo de los agricultores y que recupere para estas tierras su nicho de empleo y riqueza.

Por todo ello, las plataformas han concluido en que no puede permitirse ni un metro más de Vega "sellado bajo hormigón o asfalto".