Carlos de Inglaterra admite que es un «incordio» en la vida pública

Carlos de Inglaterra, príncipe de Gales y heredero al trono británico, ha admitido que ha sido un "incordio" en la vida pública por sus polémicas opiniones, si bien subraya que nunca se ha inmiscuido en la política partidista.

Carlos reconoce ese extremo en una entrevista concedida a la cadena británica ITV con motivo del trigésimo aniversario de la creación de la Fundación del Príncipe, una organización presidida por él y que intenta ayudar a los jóvenes a encontrar trabajo.

Preguntado por el entrevistador, Trevor McDonald, si admite que algunas personas creen que ha sido un "incordio" en los últimos treinta años, el hijo mayor de la reina Isabel II responde: "Sí, probablemente". "Me importa mucho este país y su gente", explica el príncipe al argumentar sus tendencia a expresar en público sus puntos de vista.

Carlos, cuya entrevista se emitirá este martes, ha causado revuelo en el pasado por su oposición a la manipulación genética de los alimentos o por llamar a unos diplomáticos chinos "viejas y vergonzosas figuras de cera".

El príncipe también se declara "afortunado" por el "gran apoyo" que recibe de su segunda esposa, Camilla Parker Bowles, duquesa de Cornualles.

La entrevista, grababa en Clarence House, residencia oficial del heredero al trono en Londres, forma parte de un documental en el que intervienen algunos famosos como los actores Gwyneth Paltrow y Pierce Brosnan y el cantante Phil Collins. Paltrow, quien ha hecho donaciones a la Fundación del Príncipe, define a Carlos como "un hombre con conciencia social".

El programa televisivo incluye, asimismo, imágenes de la princesa Diana de Gales, ex esposa del príncipe Carlos, quien falleció en un accidente automovilístico ocurrido en París el 31 de agosto de 1997.