«Necesitamos un AVE sin paradas y con horarios racionales»

Es el caso de José Luis Verdagay, profesor emérito del Departamento de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial de la Universidad de Granada. «Las infraestructuras son, sin lugar a dudas, el principal décifit de Granada, lo que nos sitúa ante una desventaja respecto a municipios, incluso, de menor nivel», asegura Verdagay. «A un turista -prosigue- le puede dar más o menos igual cómo llegar, pero no sucede lo mismo en ámbitos como el académico, que requiere la máxima optimización del tiempo». «Tenemos la experiencia de compañeros de universidades y centros de investigación extranjeros que han declinado viajar a Granada por el riesgo de no coger un enlace y quedarse en Madrid», indica Verdagay.

El escritor José María Pérez Zúñiga afirma que la falta de comunicaciones «son un gran lastre para el progreso de Granada». «Por eso es de máximo interés esta idea de IDEAL y por eso no dudé un segundo en firmar», dice. Unas carencias que no solo son patentes a la hora de ir y volver a Madrid con diligencia, sino también a otras zonas de España como el Levante. «Al final, la única forma para ir a Alicante es el autobús, y estamos hablando de un desplazamiento de más de seis horas». Respecto al AVE de Madrid, Pérez Zúñiga considera que no solo habría que incrementar las conexiones, sino acometer mejoras que acorten los trayectos.

El abogado Antonio Mir refiere que el AVE es «un elemento vital para que Granada siga avanzando a todos los niveles». Desde el punto de vista profesional, apuesta por un AVE que sea realmente un tren de alta velocidad y que posibilite el retorno a Granada en el día, «lo que abre un universo de posibilidades para una profesión, la abogacía, que ya se ejerce de una manera globalizada». «La colegiación te permite asumir asuntos en cualquier parte de España y Madrid es un referente», comenta Antonio Mir, vicedecano del Colegio de Abogados de Granada. «El AVE es una oportunidad para nosotros», agrega.

Desde una visión más comunitaria, Antonio Mir apunta que las comunicaciones son la demanda más recurrente en todos los foros en los que participa, y un acicate para que Granada evolucione en temas económicos, sociales, culturales y otros de gran importancia en ámbitos como la ciencia o la tecnología. «Este debería ser un asunto capital que nos preocupe a todos más allá de ideologías y colores políticos», concluye.

Óscar Ferris, director general de Limpiezas Castor, una de las empresas más importantes de Granada en facturación, volumen de trabajadores e implantación en todo el país, sufre en primera persona las dificultades de trasladarse en AVE hasta Madrid. «Es tan poco operativo -reconoce- que en muchas ocasiones opto por el coche particular, con todo lo que ello implica de riesgo en la carretera y costes». «Si finalmente te decides por el AVE, además, muchas veces estás obligado a pernoctar una noche en Madrid».

«La clave está, sin lugar a dudas, en una racionalización de los horarios, de manera que puedas estar en Madrid en los intervalos que precisas para asistir a todas las reuniones, y regresar a Granada sin tener que alargar la estancia o renunciar a gestiones importantes por no perder el AVE», asevera. De forma paralela, en línea con la propuesta de IDEAL, Óscar Ferris aboga por un AVE mucho más rápido, de unas dos horas y media, y no como el actual, que emplea hasta tres horas y media.

Según Carlos Centeno, director de Comunicación de la UGR, un AVE directo «es la única forma de fomentar el transporte público en nuestra provincia». «Si los granadinos tardan el mismo tiempo, o más, en llegar a Madrid en AVE que en sus propios vehículos, difícilmente esta prestación será competitiva». «Para la UGR significa, además, captar más talento y organizar más y mejores eventos científicos de primer nivel». «La UGR -asevera- es un referente internacional, a pesar de las dificultades que en muchas ocasiones tienen los investigadores para llegar a Granada, y un AVE directo nos haría competir en igualdad de condiciones con otras capitales andaluzas como Sevilla o Málaga».

Rafael Estrella, ex diputado y ex embajador de Argentina, considera que es fundamental que Renfe valore cuántos de los viajeros que toman el AVE en Granada se bajan en algunas de las estaciones intermedias. «Tengo el pálpito de que se llevarían una sorpresa porque el número sería muy bajo y, en consecuencia, no se hace preciso que los convoyes hagan todas esas detenciones que enlentecen el viaje», valora Estrella, quien lamenta que este AVE de tercera esté «restando tanto potencial a Granada tanto desde el punto de vista turístico como en mercados tan relevantes como el de la organización de congresos».