La mejor física de España se formará en el Clínico de Granada: «Me dio muy buena impresión»
La onubense Laura Díaz, la primera de 270 aspirantes, comenzará el 23 de mayo su especialidad en Radiofísica Hospitalaria
Cuando Laura Díaz Tomé estudiaba Física en Sevilla, había solo unas pocas chicas más en su clase, mientras que el número de varones rondaba los ... 50. Ella siempre rompió moldes. Ahora lo ha vuelto a hacer, marcando un hito al ser la número uno de España en el RFIR (Radiofísico/Físico Interno Residente). Se presentaron unos 270 aspirantes para 42 plazas. La primera ha sido para Laura, natural de Huelva, que ha escogido el Hospital Universitario Clínico San Cecilio para formarse durante los próximos tres años.
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Laura, de 23 años de edad, quería «ayudar a la gente», así que le pareció buena idea lo de ser especialista en Radiofísica Hospitalaria cuando se enteró de esta posibilidad mientras estudiaba la carrera. Hizo un primer intento, pero llevaba poco tiempo preparándose, así que se quedó fuera por poco. Para esta última convocatoria había estudiado bastante más. «Ha sido bastante sacrificado, fueron muchas horas de estudio y simulacros. Hice el examen el 21 de enero en Sevilla y salí con buenas sensaciones», confiesa.
«Calibramos las máquinas de radiodiagnóstico para que funcionen bien y nos encargamos de garantizar la calidad de los equipos»
De las 42 plazas que se ofertaron, ella obtuvo la primera. Podía escoger lo que quisiese. Tenía ganas de conocer otro lugar, pero con la premisa de quedarse en Andalucía. Granada le encantaba y se postuló como primera opción. «Me habían hablado muy bien de ella. Había presión por elegir la primera, pero tenía claro que la ciudad sería Granada», admite. El prestigio del Hospital Clínico San Cecilio la terminó de convencer, así como la charla con otros médicos que trabajan actualmente en ese servicio. «Me dio muy buena impresión, te animan a que busques lo que más te gusta de la radiofísica», añade.
Supervisar los equipos
El próximo día 23 de mayo empieza su formación. La gran pregunta para aquellos que están alejados de esta especialidad sanitaria es: ¿qué hace un radiofísico en un hospital? Laura lo explica. «Tratamos todo lo que tenga que ver con el radiodiagnóstico, como TAC o máquinas de rayos, por ejemplo. Las calibramos para que funcionen bien y nos encargamos de garantizar la calidad de los equipos. A nivel técnico tiene mucha importancia nuestra figura», detalla. También controlan las dosis para pacientes sometidos a pruebas diagnósticas con radiaciones. Aunque su contacto con el paciente no es directo, la repercusión es evidente.
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Laura afronta esta nueva etapa, que durará tres años, con una ilusión enorme. No ha realizado prácticas en esta área, así que todo será nuevo para ella. «Me apetece mucho», apostilla. No sabe qué le deparará el futuro, pero la opción más viable será entrar en una bolsa de trabajo para ser especialista en algún hospital, donde suele haber unos ocho profesionales de este tipo. Las otras salidas para los que estudian Física son la docencia, la investigación o la consultoría, entre otras. Si a Laura le convence la Radiofísica Hospitalaria, lo más probable es que la acompañe durante toda su vida. Si no, las alternativas son múltiples. Talento y ganas de aprender no le faltan.
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