Macrooperación de la Guardia Civil en Granada

La mafia narco 'cazada' en Granada estaba liderada por un turco y tenía miembros de Montenegro o Colombia

Eran en torno a las cinco y media de la mañana cuando comenzaron los registros, una veintena, que se desarrollaron en numerosas viviendas. Según fuentes a las que ha tenido acceso este periódico, se realizaron en La Zubia, Atarfe, Churriana, Motril, Albolote, etcétera. También en la capital, concretamente en la calle Joaquina Eguaras. Se llevaron a cabo durante toda la mañana de forma simultánea en Granada y en otras provincias españolas, a saber, Madrid, Málaga y Sevilla.

En toda España se desplegaron unos quinientos agentes y se ha detenido a más de veinte personas relacionadas con el narcotráfico, siendo Granada la provincia donde más personas se ha arrestado. También se incautaron en total más de dos toneladas de marihuana envasada al vacío durante los meses previos a la operación -también se intervino durante la redada de este martes- y armas, sin haber trascendido de qué tipo.

Según ha podido saber este periódico, los arrestados pertenecen a una mafia liderada por un turco que se había asentado en Granada -aquí estaba su centro de operaciones- y vendía grandes cantidades de droga por toda Europa, especialmente a países del Este. También la importaban por el sur de Andalucía. Principalmente se les incautó marihuana, pero también, en menor medida, hachís.

A los registros de Granada acudió la UCO, la Policía Judical de la Comandancia de la Guardia Civil de Granada, el servicio cinológico, la Agrupación de Reserva y Seguridad (ARS), la Unidad de Seguridad Ciudadana (Usecic), el Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) y un helicóptero que desde el amanecer prestó apoyo desde el aire, entre otros. También estuvieron presentes miembros de Europol, la Agencia antidrogas turca y agentes franceses.

Una de las entradas se produjo en la plaza del Carmen de Atarfe, donde miembros del grupo 4 de Barcelona de la ARS forzaron el portal para acceder a un bloque de pisos. De allí se llevaron detenido a un hombre. La presencia de la Guardia Civil alertó a los vecinos, que comentaban en corrillos la operación. En el bar de la esquina de la plaza, café en mano, varios clientes aseguraban que el arrestado lleva un par de años viviendo en la vivienda junto a una mujer. «No lo conocemos apenas, no es de aquí. Es extranjero, parece vikingo», señalaban. El hombre es, según el relato vecinal, «de los que venden drogas fuertes a lo grande». «El helicóptero me despertó a las seis de la mañana. Me parece muy bien que vengan, ojalá encuentren lo que busquen», comentaba una testigo.