La madre de una cría abusada por su abuelo, dispuesta a iniciar una huelga de hambre

La mujer no da crédito aún a que se haya dejado en suspenso el castigo a la persona que ha «destrozado» la vida de su hija, que ahora 15 años y sigue en tratamiento por el «trastorno emocional» que le ha quedado.

Cuando solo contaba con siete, su abuelo le invitó «a tocar su miembro viril o chupárselo». «Le decía que era la preferida, una princesa», rememora A. B., que confiesa sentir una absoluta «impotencia» por el devenir judicial del caso. Como confirma, ha recurrido la decisión y solo espera que sea revocada.

Tanto ella como su familia está «consternada» por la decisión del tribunal granadino, que llega casi 10 años después de un proceso que les ha supuesto un enorme esfuerzo económico para poder sufragarlo. Todo para que se hiciera una justicia sin la que se han quedado de la noche a la mañana. Los otros abuelos de la cría, los maternos, están enfermos, y A. B. solo quiere que vean que la persona que abusó de su única nieta paga por lo que hizo.

La mujer afirma que el alzheimer alegado es «inventado y no clínicamente confirmado», y que si el acusado presenta un leve deterioro mental es lo normal de la edad. Censura que se le permita quedar en libertad pese a la oposición de la fiscalía, puesto que está convencida de que puede ser tratado de esa demencia incipiente dentro del centro penitenciario, como concluyó el propio forense.

«Estamos consternados porque la jueza ha dicho que es por humanidad.Por humanidad mi niña ha declarado desde los 10 años en un cuartel de la Guardia Civil y en un juzgado cinco veces», recalca la mujer, que se separó en 2012 del padre de su hija. Este, según asegura, nunca la ha creído y lleva sin verla desde que formuló la denuncia. La cría luego tuvo que venir al juicio en Granada, recibir ayuda especializada y todo para al final «ver que no se ha hecho justicia con ella».