La gran central hidroeléctrica de Rules bombeará el agua desde una gran balsa ubicada a 800 metros
La compañía ha logrado ya la concesión del agua de Rules por parte de la Junta pero el proyecto queda a expensas de la línea eléctrica del Valle de Lecrín, que está paralizada
Mercedes Navarrete
Granada
Viernes, 26 de junio 2020, 00:58
Veinte años después de que la presa de Rules se terminara, sin que su agua sirva aún para regar los campos de la Costa granadina, ... es una empresa privada la que quiere comenzar a construir tuberías y aprovechar el caudal para generar riqueza con un proyecto energético millonario. La división de energía del Grupo Villar Mir anunciaba ayer que ha obtenido la concesión de aguas por parte de la Junta de Andalucía para la explotación de una central hidroeléctrica reversible con una potencia de 356 megavatios (MW) entre los municipios granadinos de Vélez de Benaudalla y El Pinar.
Además de una apabullante cifra de inversión, que la compañía cifró ayer en 300 millones de euros, Villar Mir Energía aseguró que el proyecto supondrá «una importante generación de empleo cualificado, con alrededor de 900 puestos de trabajo directos y 2.500 indirectos» tanto durante las obras de construcción de la central, que se prolongarán unos seis años, como en su explotación. La empresa explicó que está realizando los estudios geotécnicos necesarios para asegurar la viabilidad y adecuación de las obras al terreno donde se localiza el proyecto, que según pudo saber IDEAL contempla la construcción de una gran balsa a 800 metros de altura entre El Pinar y Vélez.
La concesión de aguas por parte de la Junta es un paso fundamental para que comience a andar el proyecto, que pretende completar todas las autorizaciones administrativas «a lo largo del año 2021». Sin embargo la puesta en marcha y el futuro de esta gran obra de ingeniería estará ligada a un condicionante fundamental: la existencia de una autovía eléctrica para verter la energía que se produzca.
La concesión de la Junta permite explotar el salto de agua y producir energía pero la red a la que tendría que llegar esa electricidad generada no es otra que la línea entre El Fargue y Órgiva, que atraviesa el Valle de Lecrín y que quedó paralizada el pasado mes de octubre por el Gobierno andaluz. El expediente se archivó después de que Red Eléctrica no presentara la documentación que se le requería y lo dejara caducar.
El Gobierno andaluz es receptivo al proyecto de la central hidroeléctrica reversible y la inversión que conlleva, según confirmaron ayer fuentes de la Delegación en Granada a IDEAL, pero recordaron que la autovía eléctrica entre El Fargue y Órgiva está pendiente de la resolución del recurso que presentó Red Eléctrica contra el archivo del expediente.
La única forma de reactivar el proyecto de la línea eléctrica, si se confirmara legalidad del archivo, es que Red Eléctrica Española presentara un nuevo trazado, vinculado al nuevo plan estatal de energía 2021-2015, con menor afectación ambiental, evitando la comarca de El Padul.
Mientras tanto, la línea eléctrica del Valle seguiría paralizada y por tanto condicionando también que salga adelante este proyecto de energía renovable.
Una balsa a 800 metros
El Gobierno quiere potenciar las centrales hidroeléctricas reversibles, consideradas piezas clave del entramado eléctrico de los próximos años. Se llaman así porque no solo transforman la energía potencial del agua en electricidad, sino que también pueden hacerlo a la inversa. Esto es, aumentar la energía potencial del agua, por ejemplo subiéndola a un embalse mediante energía eléctrica.
El alcalde de Vélez, Francisco Gutiérrez, que conoce bien el proyecto porque la empresa está muy en contacto con la administración local, lo resume gráficamente: «Elevan el agua cuando está barata y luego la dejan caer para generar energía cuando está cara».
En este caso, se bombeará el agua hasta una gran balsa ubicada a 800 metros de altitud, entre El Pinar y Vélez y desde ahí descenderá de nuevo, a través de tuberías, a la presa de Rules.
Desde Villar Mir Energía explicaron ayer que el proyecto de Granada se enmarca en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), remitido por el Gobierno de España a las Cortes para su aprobación, que incluye como objetivo la instalación de 3.500 MW adicionales de instalaciones con tecnología hidroeléctrica de bombeo y permitirá a España «contar con una mayor capacidad de gestión de la generación e integración de la energía renovable en el sistema».
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