«El PTS es una gran baza para la recuperación pero sector público y privado deben ir a una»

-¿Cómo nos ha cambiado esta crisis a nivel personal?

-Creo que a nivel personal, por lo menos a mí, me ha devuelto a una realidad sobre lo que realmente es importante y lo que no tanto. El confinamiento ha sido duro, sobre todo para aquellas personas que realmente han pasado por dificultades y aquellos a los que les ha tocado directamente. Y muchos de sus efectos a nivel emocional están aún por ver.

A los que somos padres y madres nos ha puesto en una tesitura de tener que descompartimentalizar. Me refiero a que hemos estado 24 horas x 7 días ocupándonos de todo, trabajo, niños, casa, en una rueda sin fin. Y esto creo que ha tenido un efecto agotador en muchos.

-¿Cómo han afrontado en el PTS y sus empresas este golpe sin precedentes? 

-Desde el PTS y la propia Fundación se ha realizado un giro extraordinario hacia el teletrabajo, que entre otras cosas ha sido posible por el alto nivel de digitalización de las empresas y entidades ubicadas en el Parque. Se ha abierto un nuevo modelo de gestión. Se ha forzado el giro hacia la consecución de objetivos, más que hacia la presencia temporal. Y también ha puesto de manifiesto ineficiencias que se han ido corrigiendo. Creo que es una nueva modalidad de trabajo que ha venido para quedarse. La convivencia entre presencialidad y teletrabajo va a ser una constante a partir de ahora.

Dentro del impacto a las empresas y dado el sector en el que nos movemos no ha sido tan negativo como en otras áreas. Evidentemente ha habido contracción en la demanda de servicios y productos de muchos, pero en general no ha sido tan fuerte como en otros sectores. También hemos visto una reorientación de algunas de las empresas para apoyar con productos y servicios a la situación de pandemia. Estas empresas han visto una oportunidad y la están aprovechando.

-¿Con qué fortalezas y debilidades afronta Granada la nueva normalidad? ¿Funcionará el PTS como motor de reactivación económica?

 -Granada cuenta con una debilidad clara, como el resto de Andalucía, y es la dependencia que tiene su economía en el sector del turismo. Este sector que tanto nos aporta ha recibido un golpe muy fuerte con la pandemia y además se prevé que sea de los sectores que más tarden en recuperarse. A pesar de todo esto, yo espero que todas las medidas que se han tomado y se están tomando, como las líneas de avales a las empresas, ayudas a pymes y autónomos y campañas de promoción reduzcan la desaparición de empresas de este sector.

Sin duda, el turismo es uno de los ejes principales para acometer la reactivación de la economía pero no hay que olvidar a otros sectores ciertamente estratégicos, generadores de inversiones y empleos de calidad. Entre ellos quiero destacar especialmente a las TIC, la biotecnología o la biosalud, que evidencian el altísimo potencial científico e investigador de nuestra tierra.

Granada cuenta, en este sentido, con una gran baza. El sector de salud ha sido menos afectado en términos de VAB (Valor Agregado Bruto). Además, se prevé una recuperación más rápida a niveles precrisis. Y el hecho de que el Parque Tecnológico de la Salud se sitúe aquí nos da una oportunidad con respecto a otros territorios de posicionarnos como foco de actividad en el sector, no solo potenciando lo que ya hay, sino creando nuevo tejido y atrayendo inversión a toda esta actividad.

Además esto, no debemos perder de vista algo básico, la calidad de vida que ofrece Andalucía en general y Granada en particular, algo que cada vez tienen más en cuenta las empresas para sus trabajadores y directivos.

-En estos momentos muchos ojos miran hacia el PTS como salvavidas para la economía granadina y motor para un cambio de modelo productivo ¿cumplirá estas expectativas?

-El PTS es una pieza clave, sí. En los últimos meses nos hemos consolidado con el núcleo de actividad de investigación y empresarial a nivel andaluz y se ha visto claramente a través de la transferencia de conocimiento que se ha producido en relación a iniciativas para luchar contra el COVID.

No obstante creo que el éxito solo lo podemos asegurar si todas las entidades, públicas, privadas trabajamos a una. Será muy importante la actividad del PTS, pero tenemos que jugar esta partida con las ayudas a la innovación que se están poniendo a nuestra disposición desde los organismos públicos, apoyando a los nuevos emprendedores coordinando los diferentes programas de emprendimiento en la provincia, usando los recursos que desde la Consejería de Economía, Extenda o la Cámara de Comercio se ponen a nuestra disposición para comercializar e internacionalizar nuestras ventas, apoyándonos en todas nuestras instituciones para atraer inversión externa.

-¿Puede traer algo de bueno la nueva normalidad al PTS? 

-En toda situación de cambio, siempre a hay cosas buenas que aprovechar, aunque a veces sea complejo verlas en el momento. Hay oportunidades y tenemos que ser rápidos en detectarlas y asumirlas.

Los ciudadanos hemos adoptado nuevos modos de consumo. Hemos de darnos cuenta de qué significa esto para nuestro negocio y adelantarnos en proponer soluciones innovadoras. También, esta crisis nos fuerza a revisar nuestros modelos de negocio en base a como se está reconfigurando la demanda y el funcionamiento de nuestros proveedores. De nuevo, debemos aplicar nuestra capacidad creativapara idear nuevos modelos que mejoren nuestra eficiencia.

La crisis nos ha sacudido y es el momento de meter una marcha más a los cambios de nuestras empresas.

-El año comenzaba para el PTS con un 'rescate' por parte de la Junta ¿Cómo ha afectado esta crisis al plan para buscar la sostenibilidad financiera? ¿Se ha avanzado en la venta de patrimonio y la reorganización de alquileres para ganar rentabilidad? 

-La sostenibilidad de la Fundación es el elemento que se lleva el mayor porcentaje de mi atención y la de mi equipo. Los inmuebles propiedad de la Fundación PTS tienen particularidades y restricciones distintas en cuanto al uso del suelo, contratos de alquiler acordados, afecciones por préstamos o subvenciones, compromisos adquiridos en convenios, etc. En muchos casos, todos estos aspectos hacen improbable o incluso inviable la enajenación del inmueble. Cada uno debe ser tratado con estas particularidades. Y para cada uno han de estudiarse las opciones legales posibles. Le aseguro que no es nada sencillo ir cumpliendo con cada uno de nuestros compromisos.

Por otro lado, vamos avanzando en la mejora de la rentabilidad de los alquileres y en la ordenación del patrimonio, pero este segundo aspecto es una carrera de fondo en la que cada paso es muy complejo desde el punto de vista legal y financiero.