Gonzalo Martínez-Carrasco ensalza la alianza de la Real Maestranza con el toreo granadino

El acto, presentado de forma impecable por Francisco Javier Álvarez, contó con una preciosa puesta en escena, en la que no faltaron los gigantes, los cabezudos e, incluso, un toro de magnífico trapío, diseñado por Yolanda Flores. El duende de David Heredia 'El Marqués' empezó a llenar el ambiente para acompañar a la guitarra el desfile de las modelos, con preciosas mantillas, mantones y peinetas de la diseñadora granadina Claudina Mata. Una pasarela de primera, que contó con la colaboración del estilista Gustavo Martín y la bordadora Encarnita Berrio.

El prodigioso toque de 'El Marqués' también se hizo presente para poner su particular acento a algunos pasajes del pregón, prologado con la adhesión de los maestrantes al proyecto de la Capitalidad Europea de la Cultura.

Manuel Martínez Carrasco y Espinosa, secretario de la Real Maestranza de Caballería de Granada, fue el encargado de introducir la figura de Gonzalo Martínez-Carrasco y De Santiago, cuya prosa tuvo también mucho de poesía. Sin duda, una figura muy valiosa «para conocer una institución que durante siglos ha mantenido viva la llama de tradición taurina en nuestra ciudad y toda Andalucía», en palabras del pregonero. La tauromaquia no podría entenderse sin esa alianza de la Real Maestranza con el toro desde su fundación en 1686 «por su defensa del arte, la cultura y la bravura».

Lo que nació como una hermandad de nobles que aspiraban a formar parte de la caballería del Rey, se sintió atraída muy pronto por el toro bravo, «como un símbolo de coraje, de nobleza natural, de fuerza sin malicia». Una relación «constante, firme y comprometida» que en Granada ha dibujado estampas tan espectaculares como las corridas celebradas en el Campo de los Mártires, el Palacio de Carlos V, la Plaza de Bibarrambla o la Carrera de la Virgen.

Los escenarios, los relatos históricos y los toreros vinculados a los maestrantes se fueron sucediendo en su discurso para mayor deleite de los asistentes. Una oratoria transmitida a golpe de corazón y escrita desde el alma, cuyos últimos pasajes estuvieron dedicados a la defensa de la Fiesta. La Real Maestranza «no la abandona, al contrario, la respalda con hechos y con su nombre». Por ello «la tauromaquia no es una rémora del pasado, es una riqueza del presente».

El segundo teniente de alcalde, Enrique Catalina, fue el encargado de cerrar el acto, felicitando al pregonero «por saber revestir de emoción, hondura y orgullo esa tarde tan especial». Subrayó la apuesta firme del Ayuntamiento por el pregón, por el 25 aniversario del Fandi y la corrida lorquiana, antes de invitar a todos a disfrutar de una feria taurina que ha despertado una enorme expectación.