El edificio Colón recibe el primer visto bueno para acoger un hotel de cinco estrellas

El arquitecto del proyecto, Pedro Salmerón, planteó a la delegación de Cultura unas cuestiones previas. Sin este visto bueno, no se podía seguir adelante. La complejidad de esta propuesta arquitectónica consiste en modificar un edificio de protección 'A1' –la máxima– en un hotel adaptado a la normativa y con todos los requisitos para que sea un cinco estrellas. El objetivo es que tenga 80 habitaciones, con capacidad para un total de 160 huéspedes.

Después de un tiempo de análisis por parte de la Delegación de Cultura, la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico ha aprobado dos cuestiones imprescindibles para empezar a redactar el proyecto: la construcción de una nueva escalera y la ubicación de los aires acondicionados.

Pedro Salmerón cuenta que sin esta primera luz verde no se habría podido comenzar el proyecto porque un hotel necesita dos escaleras y este edificio solo cuenta con una. También había que 'negociar' previamente cuál sería el impacto de la maquinaria para la climatización de este inmueble. Al final, han llegado a un acuerdo y la comisión ha desbloqueado este proyecto, interesante para la ciudad y que dará uso a un edificio vacío. Fue el propio Pedro Salmerón el que hizo la última reforma a este inmueble en los años 90 cuando lo compró la caja de ahorros. No fue una reforma en profundidad, fue más un acondicionamiento exterior, por lo que la obra para acoger el hotel será un trabajo costoso.

La escalera de servicio y evacuación, mantenimiento del patio secundario y medianera del inmueble, se ha propuesto fuera del patio secundario y éste será una pequeña sala del hotel al igual que el patio principal.

Desde la Delegación de Cultura recuerdan que será preciso un informe arqueológico tal como igualmente se prescribe para inmuebles 'A1', relativo al análisis de las estructuras emergentes. El arquitecto Salmerón resalta que el edificio es propicio para acoger un establecimiento de estas características porque todas sus habitaciones serán exteriores, ya que darán a Reyes Católicos –donde estará la entrada principal–, a Gran Vía y a la calle Zacatín.

El delegado de Cultura, Antonio Granados, indicó que se trata de un proyecto importante para la ciudad y que también se velará por la protección del edificio. La delegación granadina esperará ahora el proyecto que tendrá que ser aprobado y que describirá de manera minuciosa esta actuación en el inmueble.

Los bajos comerciales seguirán siendo de una conocida cadena de ropa y el hotel convivirá en las plantas superiores de este edificio.

La cadena Mercer Hoteles –que tiene el EME de Sevilla, junto a la Catedral y otros alojamientos de lujo– es la que quiere instalarse en el edificio Colón, un inmueble que es propiedad del empresario Tomás Olivo –propietario del Nevada Shopping– y que conservaría la explotación de sus locales comerciales. Olivo manifestó a IDEAL su deseo de que en el plazo de un año y medio pueda estar inaugurado. «Este hotel contribuirá a aumentar la excelente oferta turística que posee Granada», añadió.

Otro proyecto de similares características pretende instalarse en el edificio de Villamena.

La delegación de Cultura ya ha dado el visto bueno a este proyecto que también ha conllevado la adaptación de un hotel a un inmueble con unas características peculiares levantado sobre el solar del que fue la antigua cárcel de la ciudad.