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Disfruta de una tarde con los más pequeños en el centro

Granada ofrece gran cantidad de lugares y entretenimientos para disfrutar en familia

IDEAL

Viernes, 26 de julio 2019

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Con la llegada de las vacaciones para los más pequeños de la casa, llega también un momento ideal para poder hacer más planes con ellos. Horas y horas muertas sin clase pueden pasar factura al aburrimiento de los niños y a la paciencia de los padres, y muchas veces la mejor opción es salir a conocer algún nuevo lugar o a disfrutar de aquellos que ya se conocen, pero que siempre está bien repetir. El centro de Granada puede ser un gran lugar para disfrutar de una agradable tarde de verano (y en cualquier época del año), ya que, además de su cómoda accesibilidad, cuenta con gran cantidad de parques, plazas y zonas peatonales para disfrutar con los más pequeños a la vez que realizas cómodamente tus compras en el numeroso y variado comercio local.

En primer lugar, si se vive lejos del centro, el simple hecho llegar a esta zona puede resultar una gran aventura para niños y niños de corta edad si se escoge el metro. Para aquellos pequeños que nunca hayan hecho uso de este medio de transporte, resultará divertido el descubrir sus escaleras mecánicas, los altos techos de las paradas subterráneas (aún más impresionantes a la vista de un niño) o los suelos movedizos entre vagones. Tan solo descubrir esto puede conllevar caras de ilusión y alguna que otra sorpresa que sacará una sonrisa a pequeños y mayores.

Una vez llegados al destino, si la intención es pasear, para más seguridad se pueden escoger las muchas calles peatonales con las que cuenta el centro de la ciudad. Toda la zona que rodea la catedral, calles como Oficios, Alcaicería y las cercanas, pueden ser un buen lugar para ir de una tienda a otra, disfrutando de la artesanía granadina, y sin contar con la preocupación extra del tráfico que pueda suponer un peligro para los más pequeños.

Si las tiendas no son un plan atractivo para niños y niñas, que pronto se pueden cansar de mirar estantes llenos de productos que quizás ni entienden, los parques son otra de las opciones que pueden hacer sus tardes más divertidas. La zona céntrica de Granada cuenta con numerosas zonas de juegos y columpios para que los más pequeños disfruten. Por ejemplo, en la Plaza de la Romanilla pueden disfrutar de diversos juegos, entre los que se incluye una rayuela de colores instalada en el suelo. Bajando un poco hacia la zona del río, se pueden encontrar más parques infantiles como el del Parque de Las Palmas o el del Paseo del Salón. No demasiado lejos quedan otras zonas de juegos como las del Paseo de la Bomba, Campo del Príncipe o Plaza de Gracia.

Descanso y ocio para pequeños y mayores

El disfrutar de las zonas de juegos, o de pasear por las diversas tiendas de la zona, puede llegar a dejar exhaustos a padres e hijos después de unas horas, más si se tiene en cuenta el hándicap de las altas temperaturas. Por toda la zona céntrica de Granada se pueden encontrar decenas de bares, cafeterías o heladerías en las que parar a descansar por un rato y tomar algo para recuperar fuerzas. Las plazas están rodeadas de locales de restauración por lo que el comprar un helado y tomarlo a la sombra en alguna de ellas también puede ser una genial idea para que los niños merienden y tengan espacio en el que correr y jugar al mismo tiempo. Si se hace tarde, también hay en la zona numerosos bares de tapas o restaurantes, en los que se puede tomar una cena en familia. Muchos de ellos cuentan con terrazas, o hace uso de las propias plazas para colocar las mesas y así poder disfrutar al aire libre de un almuerzo, merienda o cena.

Sea cual sea el plan escogido, con las opciones disponibles es fácil que las horas pasen volando, lo que hará que los muchas veces tediosos días de verano se pasen más rápido para padres e hijos. El centro de Granada es un lugar ideal para disfrutar en familia, el encanto de las calles, todo lo que hay por ver y los numerosos espacios dedicados a los más pequeños lo hace el enclave ideal para las tardes de verano, sin olvidar lo sencillo que puede ser acceder hasta él, teniendo es cuenta transportes públicos, zonas por las que llegar paseando y también los parkings disponibles. Las opciones son tan variadas que no será suficiente con una tarde para disfrutar de todo aquello que se desee, y sin duda tras una excelente velada en familia no faltarán las ganas de repetir.

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