«Después de jugarnos la vida y la de nuestras familias, ahora vemos que nos pueden echar»
Enfermeros de la unidad de cuidados respiratorios intermedios delVirgende las Nieves se muestran indignados ante la posibilidad de que no les renueven el contrato
Sergio González Hueso
Granada
Viernes, 22 de octubre 2021, 00:02
Las unidades de cuidados respiratorios intermedios (UCRI) han sido una de las armas más efectivas que los hospitales han tenido para responder a las exigencias ... de la pandemia. En la del Virgen de las Nieves han trabajado en ella unos 30 profesionales de enfermería, que durante estos meses se han visto obligados a estar en contacto constante con pacientes covid con todo el riesgo que esto entraña.
A muchos de estos sanitarios se les acaba el contrato el próximo 31 de octubre, pero aún ayer desconocían si se les va a renovar o no. Lo único que les ha llegado es que los planes de la Junta para los hospitales en el caso de los enfermeros es no firmar seis de cada diez contratos, lo que les llena de rabia e impotencia. «Nos han dicho que lo más probable es que solo renueven al 45% del personal, lo que desde luego nos parece muy injusto», apuntó ayer una de las personas que han formado parte de este equipo asistencial desde mayo de 2020.
«No nos pueden dejar en la calle después de todo lo que hemos dado durante la pandemia»
«Nos hemos jugado nuestra vida y la de nuestros familiares. Casi todos nos hemos contagiado y hasta hemos perdido a algún compañero. Y aquí seguimos, hasta el último día, al pie del cañón, porque trabajamos en la única planta en la que aún hay covid. Pues bien, ahora dicen que solo nos van a renovar a menos de la mitad. Es una vergüenza», señaló otra profesional, quien mostró su enfado en la concentración que el Sindicato de Enfermería (Satse) convocó ayer en las puertas de su centro hospitalario.
Además de creer que este recorte hará mucho daño a los pacientes, también criticaron con dureza la «imprevisión» de la Junta a la hora de comunicar los 'despidos'. Muchas de estas personas, que hoy están en ascuas proceden de otras provincias, por lo que no pueden entender cómo el Ejecutivo no les ha dicho a estas alturas que pasará con ellos.
«Lo están haciendo fatal, hay mucha gente de fuera que no sabe si tiene o no que mantener el alquiler que está pagando, el colegio de sus hijos o cosas parecidas. Están en un sinvivir», apuntaron desde un corrillo en el que solo había enfado e incluso sorpresa. Desde el propio Satse recordaron ayer que la decisión afectará principalmente a los hospitales. En estos centros el recorte autonómico se justifica en la bajada de los niveles de incidencia. Pero los profesionales hoy en el alero precisan que ellos no han dejado de atender pacientes en ningún momento.«Es que las insuficiencias respiratorias siguen llegando aunque no sean covid, y hay que atenderlas», apuntó otro enfermero, que lamentó que la Administración no responda de la misma manera que lo han hecho ellos durante los peores momentos de la pandemia.
«No nos pueden dejar en la calle después de todo lo que hemos dado», criticó.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión