Desatrancan el cauce de Trasmulas que hizo tapón e inundó la A-92
Fomento localiza el punto negro que causó la anegación de la carretera y la CHG limpia el barranco para que no se repita
La dana Alice, que provocó lluvias intensas el pasado 10 de octubre, anegó la A-92, en sentido Granada, y la carretera tuvo que cortarse ... durante dos horas para achicar el agua. La interrupción de la circulación se produjo a la altura de Láchar, en el kilómetro 218. La presencia de balsas de agua generó colas de hasta diez kilómetros. Lo peor es que no era la primera vez que esta autovía se inundaba. Las anegaciones habían obligado a cortar la carretera tres veces en los últimos dieciocho meses.
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Desde la Consejería de Fomento, encargada de la carretera, iniciaron una investigación para saber cuál había sido el origen de este último taponamiento, con el objetivo de salvar la A-92 de futuras lluvias torrenciales y de cortes de tráfico. La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir se puso también manos a la obra para estudiar el origen de las inundaciones. Esta zona ya había sufrido dos anegaciones durante danas de 2024, una en abril y otra en noviembre, más o menos en la misma zona, por lo que era importante descubrir el tapón que había puesto en peligro la autovía que conecta Granada con el resto de Andalucía. En concreto, este ramal es el que enlaza con Málaga y el eje occidental hacia Sevilla.
En esta ocasión, según la delegación granadina de Fomento, el atranque estaba en la zona alta del barranco de Aneíllas, que comienza en el anejo de Trasmulas (que pertenece a Pinos Puente) y que llega hasta la misma autovía. Así lo identificaron y se dio aviso a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.
Este mismo lunes, los operarios de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir han comenzado los trabajos de limpieza de este cauce. En lo alto del barranco se lleva a cabo el desbrozado, quitando vegetación de un grosor importante que volvería a taponar esta salida de agua en caso de fuertes lluvias.
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Este cauce está cercano al Pinar de Peñuelas, algo que le hace soportar mucha cantidad de materiales de arrastre como la vegetación, ramas y también sedimentos.
En la parte baja, junto a la autovía, una excavadora quitaba arena para dejar despejado el camino a la lluvia y que esta pueda pasar por debajo de la A-92 en vez de saltar por encima y provocar una inundación y sobre todo el arrastre de lodos y vegetación, que es lo que ha obligado a cortar la vía en los últimos episodios de fuertes lluvias.
El delegado de Fomento, Antonio Ayllón, indicó que es algo muy positivo que se estén realizando los trabajos de limpieza y que «confían» en que sea solución al problema puntual de inundaciones en la A-92. Antes de la limpieza, después de la tromba de agua, las imágenes de las cañaveras taponando la rambla no dejaban lugar a dudas del origen de la invasión del agua en la A-92. Desde Fomento estaban interesados en conocer el origen de las inundaciones porque ya habían realizado obras de emergencia en la zona, tras las inundaciones de abril de 2024. Estos trabajos de reparación tuvieron una inversión de 720.589 euros y se realizaron a destajo para dejar la zona preparada para futuras lluvias.
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Las obras consistieron, entre otras actuaciones, en la limpieza de la plataforma y la reposición del firme, la barrera bionda, la señalización vertical, las marcas viales y los elementos de balizamiento, así como la reconstrucción de la plataforma y cunetas de los caminos de servicio y el retaluzado de desmontes y terraplenes y su protección con escollera.
Por eso, cuando se volvió a inundar la A-92 en octubre de este año, desde Fomento se plantearon encontrar el origen de las inundaciones, algo que según indican, se solventarán con la limpieza del barranco de Aneílla, en el que la CHG llevará a cabo algunas obras preventivas como diques.
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Otras actuaciones
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ha llevado a cabo en la provincia otras actuaciones para prevenir inundaciones ante las lluvias como el desbroce del arroyo Salado. La intervención formó parte de las obras de emergencia aprobadas para restaurar los cauces de Granada afectados por la Dana, con una inversión global de 10,8 millones de euros.
Las obras de reparación de los efectos de la Dana en el provincia se iniciaron a finales de 2024 y estaban divididas en tres lotes, el de la cuenca del río Guadix, el de la cuenca del río Baza y el de la cuenca del río Cúllar y arroyo Salado. También se actuó en la pantaneta de Barranco Hondo, otro punto negro.
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