Policías exigen un protocolo de seguridad y que se desinfecte el pabellón de Motril para evitar nuevos contagios por sarna
El Sindicato Unificado de Policía reclama al Gobierno cursos de formación y más medios para evitar los «riesgos» que están corriendo los agentes que custodian a los inmigrantes rescatados de las pateras
El contagio por sarna de un agente, que ha transmitido también la enfermedad a su pareja y a su hijo, ha generado un gran malestar ... y caldeado los ánimos de la plantilla de Policía Nacional en Motril que lleva años exigiendo, a través del SUP, más medios para hacer frente a la sobrecarga de trabajo que afrontan por las oleadas de pateras que no paran de llegar a la Costa. La transmisión de esta enfermedad a una de sus compañeras, que se encuentra de baja, ha sido la gota que ha colmado el vaso para el sindicato que, hoy lunes a las puertas del pabellón de Motril Emilio Hidalgo, donde siguen internados un grupo de inmigrantes, ha exigido al Gobierno que tome cartas en el asunto y dote a los policías de más medidas de seguridad.
Concretamente reclaman al Gobierno que ponga en marcha un protocolo de seguridad, cursos de formación para que los agentes que están en contacto con personas que tienen enfermedades infectocontagiosas sepan como actuar y que la Dirección General de la Policía se encargue de desinfectar el pabellón deportivo Emilio Hidalgo de Motril que se está utilizando como centro de reclusión, al estar desbordado el del puerto por la incesante oleada de pateras.
Tuberculosis
«El anterior jefe Superior elaboró un protocolo de actuación pero lo desconocemos, ni se han hecho cursos ni se trabaja con protocolos de seguridad para los agentes que trabajan con personas que tienen enfermedades infectocontagiosas«, ha denunciado esta mañana el portavoz provincial del SUP, César Calín, a las puertas del pabellón deportivo de Motril donde están recluidos los inmigrantes.
Y es que no solo hay casos de sarna sino que, según el SUP, en las últimas pateras también han llegado personas enfermas de tuberculosis y hasta sida, que están en el pabellón en contacto con los agentes. En este sentido, Calín señala que es necesario que los inmigrantes se sometan a un examen médico más exhaustivo que el que les realiza el equipo de emergencia de Cruz Roja en el puerto.
«Identifican con pulseras a los que están sanos y a los que están enfermos pero al final en el pabellón están todos juntos. En uno de los últimos grupos tuvimos a uno que no estaba identificado como enfermo y sin embargo un día después hubo que trasladarlo al hospital con tuberculosis«, ha asegurado.
Pero además, los agentes quieren formación y más medidas de seguridad, además de los guantes largos que se les han suministrado. «En junio pedimos monos y nos dijeron que era alarmista», ha apuntado el portavoz del SUP, que opina que ya ha pasado el tiempo de la prudencia. «Policías, abogados,... todos los que están en el pabellón con estas personas que están enfermas estamos trabajando con riesgos«, advierte Calín.
Se recupera
El portavoz del sindicato señalado que el agente se está recuperando en casa y que pudo contagiarse a través bien a través del contacto directo con un enfermo-«esta gente es agradecida y te toca»- o de la contaminación de algún sillón o material que no se limpiara.
«Por ejemplo se ha trasladado a un menor con sarna a Granada en un coche y el asiento no se no se ha desinfectado», ha denunciado Calín.
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