La compraventa de pisos resucita en Motril: el 90% de las viviendas de Playa Granada se vende sobre plano

De acuerdo con el área de Urbanismo del Ayuntamiento de Motril, el parque inmobiliario de Playa Granada está constituido por 1.000 viviendas construidas y otras 500 de ellas en obra, que están «prácticamente» vendidas.

A las 70 nuevas viviendas terminadas de la urbanización Marina Golf, pertenecientes a la promotora Moda Urbana y comercializadas por Inmobiliaria Uno, se le unirán próximamente otras 265 de Molina Olea que están en marcha –la fase uno se quiere entregar en verano– y otras 344 viviendas del grupo Mayfo, que formarán la urbanización Aguacate Beach, justo en la entrada de la calle Rector Mayor Zaragoza, en plena arteria de Playa Granada. De estos pisos, 181 viviendas están ahora en ejecución y casi el 90% ya están reservadas. Para que la segunda fase (163 pisos) comience a construirse habrá que esperar un poco más.

Miguel Rubiño, agente inmobiliario con 21 años de experiencia en Motril, se ha encargado de la comercialización de esta primera fase de Aguacate Beach. El responsable cuenta que en nueve meses se ha logrado vender 159 de las 181 viviendas que están proyectadas. Los operarios, que pusieron la primera piedra de estos bloques en noviembre, trabajan con frenesí para que esté todo listo y las llaves entregadas entre mayo y junio de 2022.

«A raíz de la pandemia ha crecido bastante la compra de viviendas en Motril. Médicos, profesores y profesionales que han estado en primera línea forman una gran parte de nuestros clientes, que buscan vivienda con vistas y una terraza. La mayoría de los compradores son de Granada, Jaén y Madrid. Hacia años que no despegaba tanto la obra», destaca Rubiño, quien afirma que, en pisos ya construidos, han tenido listas de espera para poder ver las viviendas durante los fines de semana.

A José Correa, gestor comercial de Inmobiliaria Uno, que puso a la venta las viviendas de Marina Golf, también le quitaron los pisos de las manos. El último piso de estas 70 viviendas con plaza de aparcamiento y 52 trasteros, se vendió hace tres semanas. El 90% de ellas estaban reservadas antes de acabar la obra. «Empezamos en 2018 la construcción, que se retrasó un poco por la pandemia. Este mes de diciembre se acabó la construcción y cuatro meses después no queda ni un piso libre», relata. Además de los granadinos y jienenses que eligen Motril como segunda residencia, Correa ha notado que cada vez más extranjeros eligen el municipio para asentarse. El 15% de los compradores de Marina Golf, cuyos pisos valen de media 129.000 euros, residen fuera de España.

«Playa Granada es un gran reclamo. La zona no está terminada de explotar y pronto se esperan más promociones», dice Correa. Y en efecto. Según apuntan desde el área de Urbanismo, varios promotores le han echado el ojo y han comenzado a comprar los solares que hay en las inmediaciones de estas urbanizaciones. En estas parcelas, que tienen catalogación de suelo urbano, se pueden construir otras 300 viviendas.

Playa Granada no es lo único que resucita. Las viviendas de Playa de Poniente se dan un lavado de cara. En esta zona la mayoría de las construcciones datan de los años 60 y 70. En el Camino del Pelaillo muchos propietarios han reformado sus pisos para ponerlos a la venta.

«La demanda de pisos en la playa casi siempre ha estado activa, aunque la oferta era bastante menor hace unos años. Se busca sobre todo la primera línea, por eso muchos propietarios han puesto a la venta sus viviendas en Playa de Poniente. Un piso reformado se revaloriza y se vende en una media de 150.000 euros, mientras que sin rehabilitar se sitúan en los 80.000», explica José Luis Tirado, gerente de Inmobiliaria Grupo Lumar.

En Poniente también se espera la llegada de obra nueva. De acuerdo con el consistorio, hay 26 viviendas pendientes de construcción cerca del hotel Estrella del Mar. Desde 2018, la obra no ha parado de tomar empuje en Motril. La promoción de 104 viviendas que la promotora madrileña Inmoglacial construyó hace dos años en Playa Granada significaron la reactivación del mercado inmobiliario de obra nueva en la playa de Motril tras el parón de la crisis económica. A pesar de que la compra de viviendas se ha disparado en la ciudad, el precio de los pisos no ha alcanzado los niveles que había antes de que explotara la burbuja inmobiliaria. Según las estadísticas de Idealista, el precio medio de un metro cuadrado en Motril es 1.018 euros, un 1, 5% más que en el mismo periodo de 2020, pero un 47% menos que en 2009, cuando se registraron los precios más altos y el metro cuadrado alcanzaba los 1.926 euros.