Un grupo de vándalos destroza la pista polideportiva de Santa Adela

La primera edil reclamó «un poco de civismo» a los motrileños para evitar que escenas como esta se repitan. Anunció, asimismo, que el consistorio se encargará cuanto antes de arreglar todo lo que se ha estropeado para que el resto de vecinos puedan seguir disfrutando de estas instalaciones públicas.

Por su parte, los vecinos piden soluciones más a medio plazo. Al margen de los arreglos, consideran que sería recomendable que la pista se cerrara por las noches. La representante vecinal Lidia López aseguró en declaraciones a este periódico que sería una buena idea que se cerrara la cancela de entrada con un candado cada noche y no se abriera hasta la mañana. «Es una opción rápida y barata», apuntó. Al menos, consideró, se dificultaría a estas personas incívicas que pasaran a las instalaciones. «De esta forma, si alguien quisiera entrar por la noche, tendría que saltar la verja», aseveró.

López reconoció que es la primera vez que se produce un acto vandálico tan importante en las pistas, pero dijo que sí que tienen que soportar a menudo problemas en la zona. «Cuando vienes un fin de semana por la mañana con los niños te encuentras restos de comida, litronas, cigarros...», lamentó la vecina, que insistió en que tal vez si la puerta de entrada se cerrara y se estableciera un horario se evitaría en cierto modo esta situación.

La representante vecinal dijo que podría ser la propia asociación la que se encargara de abrir y cerrar la puerta cada día. «Por ejemplo, a las nueve de la noche se cierra y ya hasta el día siguiente por la mañana no puede pasar nadie. No es algo complicado de hacer», insistió.

El objetivo es que las pistas se utilicen sólo para aquello que fueron creadas, es decir, para practicar deporte, y no para otro tipo de ocio, más o menos recomendable, que estropea el mobiliario y que provoca incomodidades tanto para padres como para niños que quieren jugar en estas instalaciones.