Chiringuito El Peñón de Salobreña a la hora del almuerzo. Javier Martín

Los chiringuitos de la Costa de Granada apuestan por el otoño

Los establecimientos han aprendido a adaptarse a todas las épocas y a un turismo cada vez más prolongado durante el año

M. J. Arrebola

Viernes, 20 de septiembre 2024, 00:05

Con la llegada del otoño, los chiringuitos de la Costa Tropical continúan siendo una parada obligada para muchos visitantes, desafiando las expectativas tradicionales de que ... su actividad disminuye con el fin del verano. En lugar de cerrar sus puertas, muchos establecimientos han aprendido a adaptarse a todas las épocas y a un turismo cada vez más prolongado durante el año. Así, estos negocios costeros aprovechan el buen clima para mantenerse en plena actividad también durante el otoño.

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Así lo ha explicado Francisco Trujillo, presidente de la Asociación de Chiringuitos de la Costa Tropical, quien subraya que el sector hostelero viene de un verano «espléndido» y siguen en lo que consideran «temporada alta» a pesar de la próxima llegada del otoño. El presidente ha querido hacer especial énfasis en que el buen clima que brinda la costa granadina es un aliado fundamental para mantener el flujo de visitantes. Según explica, «si las condiciones meteorológicas continúan siendo agradables, el otoño será igualmente exitoso para muchos negocios».

A pesar de este optimismo, Trujillo también ha señalado que algunos establecimientos cerrarán temporalmente en noviembre, pero no por falta de clientela. «Después de una intensa temporada estival, muchos tienden a tomarse un descanso», ha aclarado. Hace años los chiringuitos cerraban casi obligados por la baja afluencia de público pero gracias a la mayor diversificación de la clientela estos negocios permanecen abierto durante todo el año.

Preparados

Uno de estos ejemplos es el Chiringuito Casa Emilio, ubicado en Salobreña, que ha logrado consolidarse como un referente en la localidad. Cristina Rodríguez, hija del propietario, ha señalado cómo el negocio ha conseguido mantener una estabilidad significativa durante todo el año. «Aunque hemos reducido la plantilla con el fin de la temporada alta, seguimos teniendo una clientela fija. Contamos con turistas extranjeros y también con muchos granadinos que, aprovechando el buen tiempo, bajan a la costa los fines de semana», ha comentado Rodríguez.

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Además, Cristina ha destacado que abren todo el año, y eso les caracteriza, ya que la gente sabe que estarán ahí para servirles.

En la misma playa, el chiringuito El Peñón de Salobreña también afronta un «buen» otoño. Su propietario, Francisco Pérez, pone el foco en los visitantes con segundas residencias y en los turistas extranjeros que frecuentan la zona durante los meses de otoño. «Este público es el que realmente nos da de comer en esta época del año», ha explicado Pérez. Entre sus clientes se encuentran alemanes, suizos e ingleses que residen en la urbanización Monte de los Almendros, lo que asegura mantener el negocio con las puertas abiertas.

Siguiendo el litoral granadino, en la localidad de Almuñécar también hay chiringuitos que han sabido adaptarse al cambio de estación. Francisco Mingorance, propietario del chiringuito La Dorada de Plata, observa cómo el negocio sigue atrayendo visitantes. «Nuestra barca de espetos está operativa los 365 días del año», ha explicado.

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Un otoño prometedor

El sector turístico en la Costa Tropical se enfrenta a un otoño en el que el buen tiempo es un factor clave para mantener la afluencia de turistas. Sin embargo, la falta de una promoción constante y adecuada de la comarca sigue siendo un obstáculo para consolidar este destino más allá del verano.

A pesar de todo, los chiringuitos de la Costa Tropical siguen demostrando su apuesta por ofrecer un servicio de calidad durante todo el año, consolidándose como un destino atractivo no solo en verano, sino también en otoño.

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