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Plácido José Lara, feliz por conseguir la segregación de Torrenueva, posa para IDEAL en uno de los espigones de la playa. Javier Martín
El alcalde conciliador que llevó a buen puerto una lucha de 20 años

El alcalde conciliador que llevó a buen puerto una lucha de 20 años

Plácido Lara aspira a ser el primer regidor del nuevo Ayuntamiento de Torrenueva Costa y reivindica el trabajo de su partido, el GRITO en este logro histórico

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Lunes, 8 de octubre 2018, 16:43

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Los ocho presidentes de las ELAS andaluzas que han logrado su segregación tenían un grupo de whatsapp que se llamaba 'Ser municipio es posible' y ahora se denomina 'Los ocho grandes'. En ese grupo, el presidente de la ELA de La Guijarrosa soltaba la noticia bomba cuatro días antes de ser oficial: había estado en un acto con la presidenta de la Junta y le había asegurado que lo suyo iba el martes al Consejo de Gobierno. Sin poder decir nada, Plácido Lára, el alcalde pedáneo de Torrenueva pasó esos días sin dormir y hecho un manojo de nervios. Hasta que llegó la confirmación oficial, que le ha dejado una sensación inmesa de felicidad y también responsabilidad, ya que ahora tendrá que pilotar el proceso a la independencia y sueña con conseguir el primer bastón de mando del Ayuntamiento de Torrenueva Costa tras las próximas elecciones.

«Después de tanta lucha, me hace muchísima ilusión, conozco bien el Ayuntamiento. Es apasionante pero a la vez un reto, porque se acabó la justificación de que Motril no nos manda Policía», esgrime.

Para Plácido José Lara Maldonado (Torrenueva, 1976), empresario agrícola de profesión, todas las aspiraciones políticas están en Torrenueva. Todo empezó hace 20 años, en una reunión de la asociación de vecinos, que sería el germen del GRITO, en el cine Torremar. «Cuando vi a aquella gente pensé, estos sí van a pelear por Torrenueva». Y se sumó al barco. Lara reivindica así la labor del GRITO y de su antencesor, el exalcalde Manuel Carrascosa, aunque sus estilos de gobierno son bien diferentes.

El de Lara se ha caracterizado por evitar la confrontación a toda costa con el Ayuntamiento matriz de Motril y apostar por el entendimiento. «Yo he sido el último peón pero esto lo ha conseguido el GRITO y lo ha conseguido Torrenueva», concluye.

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