Un centenar de profesores de la concertada podrán acceder a la jubilación anticipada

Con esta medida, los profesionales de la educación concertada que tengan más de 61 años y 8 meses pueden reducir su jornada a la mitad en este 2019 sin perder retribución como paso previo a su jubilación definitiva, que se producirá a partir de los 65 años. Según este convenio, en el siguiente año, el 2020, se aumentará en dos meses la edad necesaria para acogerse a esta medida, por lo que los profesionales deberán tener más de 61 años y diez meses. Será en 2021 cuando deban tener 62 años de edad, tope máximo que se ha puesto en el acuerdo para acceder a esta jubilación parcial anticipada.

Esta situación afecta a cerca de un centenar de profesionales, según las estimaciones de los sindicatos que han participado en la elaboración de este nuevo convenio. Este periódico ha intentado obtener los datos oficiales recabados por la Consejería, pero no ha sido posible.

La medida se ha conseguido tras la firma de un acuerdo entre la Consejería de Educación y los representantes sindicales FSIE, CCOO, USO y UGT, así como con las organizaciones patronales y de titulares Escuelas Católicas, CECE, ACES y SAFA. Durante el encuentro, el consejero puso sobre la mesa la hoja de ruta que ha diseñado su departamento para «marcar el camino y los principales aspectos a desarrollar en relación con el sector de al enseñanza concertada», cita en la que les aclaró que «lógicamente los puntos esenciales de este documento serán negociados en la Mesa de la Enseñanza Concertada», donde espera alcanza el «mayor consenso» posible en las distintas propuestas.

Los sindicatos que han participado en estas reuniones aseguran que es positivo haber llegado a este punto, pero que no es la diea idónea que ellos esperaban obtener, pues querían conseguir cubrir el 75% con jubilación y que los profesionales solo tuvieran que dar el 25% de sus horas, tal y como sucedía desde 2012 hasta el pasado año. El secretario Enseñanza Privada y Discapacidad de FETE-UGT Andalucía, Jesús Bru Lobato, afirma que en esos años, los profesionales se podían jubilar de forma anticipada y parcial cubriendo el 25% de su jornada únicamente, sin que las empresa tuvieran ningún coste adicional por parte de la seguridad social, hecho que ha cambiado es 2019. Ante las «dificultades económicas» que supuso este cambio que provocaba sobrecostes en la empresa y las administraciones, se ha puesto sobre la mesa la postura que ya han firmado en este nuevo convenio: que los profesionales puedan jubilarse de forma parcial y anticipada al 50% de su jornada. Además, según cuenta Bru, se puede acceder a ese 75% de jubilación, pero cumpliendo una serie de condiciones: que colegios puedan hacer frente a las horas que no trabaje este profesional, que lleve seis años cobrando su salario de la Consejería –asunto que en Andalucía cumplen todos–, y que esté trabajando de forma indefinida. «Apenas se darán casos de jubilación al 75% porque es muy complicado que un colegio pueda hacer frente a esos aspectos. La mayoría serán del 50%», indica el secretario general de UGT.

Tal y como explica Adriano Fernández, secretario de enseñanza privada de CCOO, se trata de un acuerdo «de mínimos» que no consigue solventar completamente las peticiones de los profesionales, pero que cuenta con la parte positiva de que posibilita que se rejuvenezcan las plantillas en los colegios e institutos concertados. Según explica Marcial García Piqueras, secretario provincial de FSIE Granada, esta medida permite que profesionales de más edad puedan acceder a una jubilación antes de los 65 años, «por lo que pueden tener una mayor calidad de vida trabajando la mitad de su jornada con el mismo salario». Además, ayuda a que más profesores puedan acceder a un puesto de trabajo al tener estas horas por cubrir.

«Pero pedimos que se equipare las condiciones de la educación concertada con los de la pública para que los profesional tengan las mismas condiciones y trabajen en igualdad de condiciones», reclama el secretario de enseñanza privada de COO.