La Cámara de Cuentas alerta de que Granada incumplió todos los planes de ajuste en un lustro
El informe de fiscalización del Ayuntamiento de Granada refleja cómo creció el endeudamiento hasta colocar a la ciudad en un «riesgo alto» de sostenibilidad financiera
M. VICTORIA COBO
GRANADA
Miércoles, 22 de noviembre 2017, 10:37
La Cámara de Cuentas terminó este verano la fiscalización de la situación financiera del Ayuntamiento de Granada. Este organismo andaluz ha revisado la actividad económica ... del Consistorio de la capital durante el ejercicio 2015 -bajo gobierno del PP-, principal objeto de análisis, pero también se han tomado datos hasta julio de 2017 para tener elementos de comparación y contextualización. En su informe, la Cámara de Cuentas hace un análisis de la foto fija de ese momento y concluye que en la ciudad se incumplieron los tres planes financieros aprobados desde 2012 para tratar de sanear la economía granadina y reducir su déficit. Esto ha provocado que la ciudad se encuentre en «una situación de riesgo alto de sostenibilidad financiera».
En su informe provisional, al que ha tenido acceso este periódico, la cámara llama la atención «sobre la difícil situación financiera del Ayuntamiento de Granada, tal y como se deduce de los estados financieros fiscalizados».
'Papel mojado'
El informe de la Cámara de Cuentas viene a llamar la atención sobre algo que, por repetido, había pasado a 'normalizarse' en plaza del Carmen. En sus informes trimestrales de seguimiento, el interventor lleva años avisando de que no se cumplen los planes de ajuste y saneamiento, documentos que el Ayuntamiento tuvo que aprobar precisamente porque no se paga en plazo a los proveedores y la deuda no hace más que subir.
En 2012, la ciudad recibió 107 millones de euros para abonar facturas pendientes, pero para pagar esos préstamos se comprometió a elaborar un plan de ajuste -con medidas de ahorro- que debía cumplir. En 2013 se solicitaron otros 53 millones y se actualizó el plan de ajuste. Posteriormente, al incumplirse el periodo medio de pago a proveedores -situado en 30 días-, la ciudad tuvo que elaborar otro plan económico financiero.
La Cámara de Cuentas analiza el seguimiento que se hizo de los distintos planes de saneamiento y concluye que no se cumplieron ni en materia de gastos ni de ingresos. Tanto la Junta de Andalucía como el Ministerio de Hacienda han requerido a la ciudad para que cumpla las previsiones contenidas. Y recuerda el informe que este incumplimiento reiterado podía dar lugar a que se aplicaran medidas coercitivas -la 'intervención' por parte del Ministerio- que, de momento no se han aplicado.
Solo se recaudan el 18,22% de las multas y sanciones
El informe de la Cámara de Cuentas incide también en el análisis de los presupuestos, así como los mecanismos de gestión. Y hay un dato llamativo, ya que el organismo comprueba que «el porcentaje de recaudación en multas y sanciones es del 18,22%». También se destaca que hay recibos que el Ayuntamiento tendría que cobrar con una antigüedad que se remonta a treinta años (1985) y en el 56% de los casos es superior a cuatro años, cantidad que suponía 106 millones de euros en el ejercicio 2015.
«Durante el ejercicio 2015 la entidad local ha tramitado expedientes de cancelación de derechos por prescripción por importe de 30,8 millones», recoge el informe. Es decir, que se dejaron prescribir por antigüedad recibos por ese importe.
También se detiene el documento en analizar el convenio entre Resur (empresa del tratamiento de residuos) y el Ayuntamiento para la liquidación y pago de las cantidades pendientes, que se cifra finalmente en 8 millones de euros, que se saldan a razón de 1,4 millones anuales. «Los intereses devengados durante el periodo 2014-2015 se cifran en 819.947 euros, que representan el 8% de la deuda total con el servicio». A este ritmo, apunta la Cámara de Cuentas, el Ayuntamiento de la capital terminaría de pagar en el año 2025 esta deuda.
En el examen que hace la Cámara de Cuentas, queda reflejado cómo la ciudad ha visto incrementarse el remanente negativo de tesorería -la deuda- desde los 6,8 millones con los que se cerró el año 2013, a los 61,88 millones del ejercicio 2016. «A pesar de que el remanente de tesorería viene siendo negativo en los últimos años, el pleno de la corporación no ha adoptado ninguna de las medidas previstas (...)», se sorprende el organismo, puesto que no se redujeron gastos «por cuantía igual al déficit producido, no se concertó operación de crédito ni se aprobó el presupuesto del ejercicio siguiente con superávit inicial de cuantía no inferior al repetido déficit».
Entre esas deudas pendientes en 2015 figuraban 9,9 millones al Servicio Provincial de Tratamiento de Residuos Municipales; 11,8 millones a Rober; 22,6 millones a Inagra y 231 millones de deuda financiera a largo plazo más otros 36 a corto plazo.
Incorrecciones
El informe, al que el Ayuntamiento puede presentar alegaciones, se limita a comprobar los parámetros económicos. Pero también encuentra algunas incorrecciones en la forma en la que se gestiona la economía. Así, pone pegas a cómo se están gestionando los llamados 'reconocimientos extrajudiciales de crédito', que son pagos por servicios o bienes que efectivamente ha recibido el Ayuntamiento, pero que no estaban reflejados en los contratos con sus proveedores. Señala la cámara que se están haciendo sin seguir los procedimientos legales establecidos, porque se les está pagando a las concesionarias el beneficio industrial, cuando son servicios fuera del contrato. La Cámara recomienda al Ayuntamiento que agilice los cobros pendientes, y que apruebe unos presupuestos generales anualmente incluyendo superávit que permita ajustar la deuda, así como hacer cambios para abaratar el transporte público.
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