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Asamblea de socios de Caja Rural Granada celebrada ayer en la sede central de la entidad. RAMÓN L. PÉREZ
Caja Rural aprueba por unanimidad el informe de gestión en su asamblea

Caja Rural aprueba por unanimidad el informe de gestión en su asamblea

La cooperativa de crédito granadina obtuvo unos beneficios de 33,1 millones de euros, un 38,5 por ciento más que en 2017

R. I.

Granada

Miércoles, 10 de abril 2019

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Caja Rural Granada celebró ayer su asamblea general ordinaria, en la que los socios aprobaron por unanimidad todos los puntos del orden del día, entre los que se encuentran el informe de gestión, las cuentas anuales, el informe de auditoría y la propuesta de distribución de excedentes.

El presidente de Caja Rural Granada, Antonio León Serrano, presentó un análisis del contexto económico, en el que la entidad desarrolla su actividad, y explicó los aspectos más importantes desde el punto de vista financiero y de resultados de la cooperativa de crédito durante el pasado ejercicio, en el que Caja Rural obtuvo un beneficio de 33,1 millones de euros. El balance se cerró en 5.845,5 millones de euros y la ratio de solvencia en el 18,04%, lo que sitúa a Caja Rural Granada como una de las entidades más solventes de España.

  • Beneficios Caja Rural Granada cerró 2018 en 5.845,5 millones de euros y obtuvo un beneficio de 33,1 millones de euros en 2018, un 38,5% más que en 2017.

  • Solvencia La ratio de solvencia de la entidad se cerró en un 18,04%, lo que sitúa a la Caja entre las entidades más solventes de España.

  • Plantilla Caja Rural Granada cuenta con 793 empleados repartidos entre sus 192 sucursales y la sede central de Granada.

Durante la asamblea, el presidente destacó el compromiso de Caja Rural con la sociedad y con el territorio donde está implantada. Este compromiso se materializa a través de Fundación Caja Rural Granada y de Fondo de Educación y Promoción (FEP), a los que se destinaron durante 2018 un total de 3,2 millones de euros para ayudar a colectivos desfavorecidos o en riesgo de exclusión social, a promover la investigación y la innovación en campos como la salud, el sector agroalimentario y el medio rural, a mejorar la competitividad de cooperativas y empresas de nuestro entorno, a la formación de los socios, promoción del cooperativismo, apoyar y fomentar la cultura, sobre todo de jóvenes talentos, promocionar el deporte base y en definitiva, contribuir a mejorar el bienestar de los ciudadanos, «invirtiendo en nuestra sociedad parte de los beneficios que genera nuestra actividad financiera».

«Seguramente esta sea una de las razones por las que nuestros socios y clientes nos han elegido como una de las mejores entidades que operan en España, según ha publicado la revista Forbes», añadió el presidente.

El director general de Caja Rural Granada, Jerónimo Luque Frías, presentó a la asamblea con mayor detalle las cuentas anuales y el informe de gestión correspondientes a 2018. La asamblea aprobó el reparto del beneficio del ejercicio, del cual 29,1 millones de euros irán a incrementar sus reservas, reforzando aún más sus recursos propios y sus perspectivas de crecimiento. El resto estará destinado a nutrir el Fondo de Educación y Promoción y a retribuir las aportaciones al capital de sus socios.

Ratio de capital del 18%

Así, la cooperativa de crédito granadina alcanzó en 2018 un volumen de capital y reservas de 552 millones de euros, con una ratio de capital total del 18,04%, muy por encima del legalmente exigido, siendo una de las entidades más solventes del sector. En cuanto a la liquidez, también alcanzó una más que respetable LCR (ratio de cobertura de liquidez), del 733%, sustentada en una magnífica estructura de inversión sobre depósitos del 86,18%.

Estos resultados son el reflejo de la excelente labor de la plantilla de la entidad, señalan desde Caja Rural Granada, que cuenta con 793 empleados, y a una amplia red de oficinas, 192 sucursales, repartidas en las provincias de Granada (153), Málaga (29), Almería (9) y Madrid (1).

Ante un entorno de bajos tipos de interés y presión competitiva, la cuenta de resultados tuvo un excelente comportamiento. El margen de intereses ha experimentado un incremento de 6 millones de euros, cerrando en 86,4 millones de euros. Este aumento se debe, al descenso en los gastos por interés de 3,6 millones de euros y al incremento de los ingresos financieros de 2,5 millones de euros. El resultado por operaciones financieras se cifra en 4,9 millones de euros, gracias principalmente, a las plusvalías obtenidas por la venta de participaciones. Todo lo anterior explica que el margen bruto de la entidad cierre el ejercicio en 118,5 millones de euros.

La Caja ha seguido realizando un significativo esfuerzo en la racionalización y control de costes; a pesar de ello, los costes de explotación se han visto incrementados un 3% en 2018, 2,1 millones de euros respecto al año anterior, esencialmente en los gastos del personal, donde una vez más la entidad ha recompensado el esfuerzo constante de lo que considera su mayor activo, sus empleados.

Saneamientos adicionales

Los saneamientos realizados en 2018 han cumplido con todas las exigencias normativas, tanto en materia de dudosidad, como por otro tipo de contingencias. La excelente evolución del margen de explotación ha permitido realizar saneamientos adicionales que sitúen a la Caja en una posición cómoda ante cualquier contingencia. De esta manera, el saneamiento neto total realizado en 2018 asciende a 25,2 millones de euros y la ratio de dudosidad ha mejorado sensiblemente, pasando de un 6,49% en 2017 al 4,73%.

Como consecuencia de todo lo anterior, el resultado antes de impuestos fue de 34,1 millones de euros. Una vez deducido el gasto por el impuesto de sociedades, el resultado del ejercicio asciende a 33,1 millones de euros, frente a los 23,9 millones de euros registrado en el mismo mes del ejercicio precedente.

La mayor vinculación de socios y clientes con la entidad se ve plasmada en un sostenido aumento del número de productos contratados, gracias a la banca de proximidad y calidad comercial de la plantilla de la Caja. La base de clientes en 2018 alcanzó los 413.201, de los que 106.135 son, a su vez, socios; es decir, uno de cada cuatro clientes es, además, socio de Caja Rural Granada, lo que consolida su modelo de negocio, basado en el cooperativismo.

Las perspectivas para el ejercicio 2019 son muy positivas. Caja Rural Granada continuará apostando «por la calidad, cercanía y confianza mutua con el cliente». Su objetivo es ser la entidad financiera de referencia en las provincias en las que desarrolla su actividad y destinará un presupuesto de 3,3 millones de euros a impulsar la investigación, innovación, el desarrollo de las empresas cooperativas, la cultura, el deporte, ayudar a personas y colectivos en riesgo de exclusión social, y otras acciones a través de Fundación Caja Rural Granada y Gabinete Técnico.

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