Bruxismo, el otro 'virus' de esta pandemia que ataca a tus dientes
La tensión y la inquietud por la Covid-19 están detrás este año del incremento general de roturas de piezas dentales y del estrés en la mandíbula
Sergio González Hueso
Granada
Domingo, 1 de noviembre 2020, 01:11
Si últimamente tiene la mandíbula cargada, le duele la cabeza o ha visto cómo uno de sus dientes se ha partido inexplicablemente, lo más probable ... es que tenga un trastorno interno en la articulación temporomandibular (ATM). O en román paladino: bruxismo. Tal y como alertan desde las clínicas odontológicas, este problema de salud se está extendiendo este año casi con la misma rapidez que lo hace el virus. Según explica la dentista, cirujana oral y maxilofacial y doctora en Medicina y Cirugía, Adoración Martínez Plaza, después de que acabase el confinamiento y abrieran las consultas se recibió a un aluvión de pacientes con dolor principalmente en la cara, pero también en el cuello, el oído e incluso presentaban rotura de dientes.
Síntomas que están asociados a este trastorno, que sobre todo se produce como respuesta a situaciones de estrés, miedo o incertidumbre. ¿Les suena? «Efectivamente, todo lo que estamos viviendo como consecuencia de la pandemia está provocando un aumento de casos de bruxismo muy grande», cuenta Martínez Plaza.
De acuerdo con lo que dice, esta tensión acumulada provoca que algunas personas aprieten la mandíbula con mucha fuerza sobre todo a la hora de dormir. Esto produce un efecto nocivo en los dientes y también una sobrecarga en la ATM, que es la articulación que permite que podamos abrir o cerrar la boca. En ocasiones la fuerza a la que se somete a los dientes es tal que llegan incluso a fracturarse. Inflamación en las encías, bloqueo en la mandíbula o incluso contracturas cervicales son también otros avisos de que se tiene este mal hábito, que en la medicina está considerado como un trastorno crónico.
Para esta especialista, el teletrabajo influye también en el desarrollo de esta dolencia. El mal hábito postural es otro factor a tener en cuenta respecto a un bruxismo que afecta a entre un 10% y un 15% de la población. En su mayoría, mujeres. Trabajar en casa es sinónimo en muchas ocasiones de no tener los medios adecuados para desempeñar los quehaceres profesionales. Y aunque a veces no lo parezca, esto también afecta al bienestar corporal.
Martínez Plaza señala que a nivel médico el bruxismo se trata con antiinflamatorios y, de ser necesario, también relajante muscular. Pero lo más importante es la prescripción de lo que se llama férula de relajación neuromuscular. Que no es más que una suerte de protector bucal que se hace con un molde personalizado y que inactiva la sobrecarga que se ejerce en el arco dental.
Consejos
Además de lo ya expuesto, la doctora opina que es recomendable seguir también otras consideraciones si se tiene bruxismo. Lo primero es tratar de eliminar o minimizar el factor de estrés. Encomendarse a un psicólogo cree que es necesario en el caso de que uno mismo no sea capaz de evitar esa carga mental paralizante. Asimismo, ve al yoga como una buena terapia alternativa para tranquilizarse.
Por otro lado, el estilo de vida hay que cuidarlo. Según dice, es fundamental cuidar la dieta. Para el bruxismo se aconseja tener una dieta blanda en la que se eviten los alimentos que obliguen a masticar mucho. Como por ejemplo, la ternera, los bocadillos de jamón o las manzanas. Huir de los chicles o de comerse las uñas también es aconsejable si se padece este trastorno, cuyo crecimiento es directamente proporcional a los rigores y exigencias de una pandemia que, como se ve, nos ataca de mil formas.
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