La asamblea de UP decide si acepta el acuerdo programático con el PSOE

A la cita, que está convocada esta tarde con carácter telemático, se llega con un documento que es fruto de meses de negociación entre PSOE y Unidas Podemos. Según las fuentes consultadas, recoge una treintena de medidas en diferentes materias –Medio Ambiente, Movilidad, Servicios Sociales...– propuestas por la confluencia en las distintas reuniones mantenidas desde septiembre, cuando ambos partidos decidieron sentarse con la idea de establecer un acuerdo de líneas generales que permitiera a la corporación culminar el mandato lejos de los vaivenes sufridos en la etapa anterior.

No están todas las iniciativas planteadas durante las conversaciones. Así lo reconocieron ambas partes tiempo atrás, cuando explicaron que la situación económica municipal y los tiempos que restan para las próximas elecciones impedían que, pese al consenso en su adecuación, se pudieran poner en marcha en este mandato. Entre las excluidas están, por ejemplo, las que afectan a la implantación de la gestión directa en los servicios de limpieza y transporte público, precisamente uno de los asuntos que se debate este martes en la comisión informativa de Movilidad.

Al cierre de esta edición, el grupo municipal de Unidas Podemos aún no había tomado una decisión sobre el documento. De hecho, según indicaron desde la formación, los tres ediles –Antonio Cambril, Elisa Cabrerizo y Francisco Puentedura– tienen previsto reunirse en la mañana de hoy con la idea de fijar una posición común de cara a la asamblea, que es quien tiene la última palabra.

Este órgano, que lleva por nombre Granada se encuentra, es el mismo que dio forma a la candidatura y está integrado por miembros de Podemos, Izquierda Unida y colectivos independientes. A sus sesiones asisten habitualmente más de un centenar de personas que intervienen en los debates y tienen derecho a voto, si bien, como confirman diferentes participantes, hasta ahora han venido tomando decisiones de manera consensuada, sin necesidad de llegar a votaciones.

El apoyo o no al acuerdo programático puede tener influencia de cara a la negociación de los presupuestos. Aunque el portavoz de Unidas Podemos, Antonio Cambril, desvinculó una decisión de la otra en declaraciones realizadas a este periódico la semana pasada, a nadie se le escapa en la plaza del Carmen que la ratificación del documento facilitaría la suma de la misma manera que un rechazo a la propuesta supondría una dificultad añadida en unas conversaciones no exentas de obstáculos por circunstancias ajenas a ambos partidos como la propia situación de las arcas municipales.

Pese al esfuerzo realizado en los últimos años para disminuir la deuda, el Consistorio sigue atado a un plan de ajuste que constriñe las opciones para destinar partidas a servicios municipales, cubrir las necesidades de la plantilla municipal y ejecutar inversiones, asuntos que están en el centro del debate y a los que hay que hallar solución.