La Policía Local capturó a una serpiente de gran tamaño en una vivienda de Ogíjares. Policía Local Ogíjares

Capturan una serpiente de gran tamaño en una vivienda de Ogíjares

Aunque esta especie es «semivenenosa», es muy poco probable que llegue a morder al ser humano

Laura Velasco

Granada

Miércoles, 19 de octubre 2022, 13:20

Los vecinos de una vivienda de Ogíjares se llevaron ayer por la tarde una amarga sorpresa al encontrar a una serpiente de gran tamaño ... en su patio, junto a la piscina. Al verla, llamaron a la Policía Local del municipio «completamente aterrorizados». El Cuerpo acudió inmediatamente y lograron capturarla sin lesionarla. Tras comprobar que no requería de ningún tratamiento, el animal fue devuelto a un entorno adecuado.

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Según explica el biólogo y naturalista Raúl León, se trata de una culebra bastarda (Malpolon monspessulanus), en concreto un macho adulto, que a lo largo de los años ha conseguido adaptarse a los hábitats que el hombre ha modificado. El experto explica que la mayoría de serpientes de la zona -este término engloba también a las culebras y víboras- son inofensivas. Dentro de las culebras, hay dos con colmillos traseros que serían la excepción. La bastarda sería una de ellas, aunque no tiene por qué ocasionarnos problemas, ya que es «semivenenosa» y rara vez llegaría a morder al ser humano.

«Tiene unos colmillos alargados en la parte trasera asociados a unas glándulas para cuando capturan a su presa, pero si no les haces nada no muerden. Incluso a los que las manipulamos rara vez nos ocurre, solo atacan si las coges y les haces daño, pero si no no se van a avalanzar», añade Raúl León, que insta a «mantener la calma» si la encontramos. «Es como un lagarto que ha entrado a casa por confusión, pero no es peligrosa», concluye.

¿Qué hacer si encontramos una?

Estos desagradables encuentros son más comunes de lo que la población imagina, según explica la Policía Local, que suele recibir varios avisos de este tipo a lo largo del año, especialmente en primavera. «Normalmente ocurre cuando salen del letargo en busca de otras zonas y nuevos alimentos, por lo que pueden acceder a alguna vivienda. Suelen estar situadas junto a solares o terrenos de uso agrícola», explica.

El Cuerpo recuerda que, en caso de que ocurra, hay que llamarles para que la capturen ellos mismos o activen los servicios operativos precisos para su captura. «Son especies protegidas que cumplen su función en el ecosistema y que no se pueden matar. Evite golpearlas o aplicar insecticida o productos químicos», añade.

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