«Quiero convertir una aldea vacía de Granada en hogar para refugiados»

¿Cree que podría hacer más?

Me queda mucho por hacer, y animo a la gente a que haga lo mismo, prescindiendo incluso de cosas importantes, ya que el placer de ver que estás ayudando y salvando vidas es mayor que el placer que te pueden proporcionar esas cosa materiales.

¿Qué le ha parecido el documental?

Es muy impactante. Lo he visto dos veces, en Madrid en la Premier y ayer con toda la empresa. Jordi Évole ha sabido plasmar la situación y hacer que la gente se ponga un poco en la piel de los refugiados. Al final de la proyección Évole me llamó para decir unas palabras, y la verdad es que me emocioné. Terminé soltando algunas lágrimas, y no fui el único, el ambiente era muy emotivo.

¿Ha participado mucho en la grabación?

Bastante. Jordi Évole conoció el proyecto desde el principio, le pareció una idea interesante y quiso grabar el traslado del barco desde el primer momento. Se ve como firmamos el contrato con Proactiva Open Arms, como sale el barco de Málaga, y como navega hasta Barcelona, donde empezaron a reformarlo.

Ha entregado su barco a modo de cesión, ¿por cuánto tiempo?

La cesión se ha hecho por tiempo ilimitado. Yo quería donarlo, pero la Proactiva Open Arms vive de donaciones, y puede llegar el día en el que no puedan mantener el barco. Si eso pasa, volvería a mí, pero mi idea es no recuperarlo.

¿Qué le llevó a tomar la decisión de ceder su barco?

Surgió un día navegando con mi familia por las Baleares. Recibí una fotografía en la que se veía una barca de refugiados, imagen que me impactó mucho. Empecé a mirar el mapa y me di cuenta de que estaba a dos días de navegación de aquella patera. Aquello me hizo ser consciente del contraste, comenté el tema con mi mujer y empezamos a buscar empresas que trabajasen en el mar. Me llamó la atención Proactiva Open Arms, e inicié el contacto con ellos. En principio no se lo creían cuando les dije el tipo de barco que era y su tamaño. Vinieron a verlo, les pareció bien e iniciamos los trámites. La idea era que el Astral estuviese en el agua como barco de salvación lo más pronto posible. Finalmente partió el 26 de julio, casi un año después de que tomase la decisión de cederlo.

¿Sigue manteniendo contacto con el barco?

Tengo contacto continuo con Óscar Camps, director de Proactiva Open Arms, y con gran parte de la tripulación del barco. Me cuentan con frecuencia cómo va todo, así como los progresos que se consiguen.

Después de esto, ¿tiene en mente más proyectos?

Tengo un proyecto que es aún muy embrionario. Quiero convertir una aldea vacía de Granada en un hogar para refugiados, de forma que puedan vivir y trabajar allí. Querría encontrar una pequeña población que esté abandonada. Es un proyecto que llevará mucho tiempo, pero que veo factible. De hecho, en Italia se ha hecho, y hay una aldea en la que conviven personas de 20 nacionalidades.

A pesar de acciones como esta, se siguen viendo pateras con cientos de inmigrantes casi cada día, ¿qué opina de la labor que se hace al respecto?

Creo que se está haciendo poco. Si seguimos así seremos recordados en la historia como quienes no vieron lo que estaba pasando. En lo que va de verano han muerto unas 3.500 personas, la gente llega a Europa pensando que aquí podrás salvar sus vidas y en muchas ocasiones son repatriados a su país de origen, sin tener en cuenta lo que les ha costado llegar. Hay personas cuyo viaje para llegar hasta barcos como el Astral ha durado alrededor de tres años.

¿Cómo cree que se podría concienciar a la gente de esta situación?

Parte del problema es que desde la televisión todo se ve muy lejano. Es algo que hay que vivir más de cerca, y en este sentido lanzo un llamamiento para que la gente vaya a ver el documental Astral, ya sea en el cine o este domingo en Salvados. Jordi Évole ha conseguido que la gente se acerque un poco a esta situación. Cuando lo vi en el cine hubo un silencio absoluto al final, porque la gente realmente lo vive y comprende por lo que están pasando los refugiados.

¿Volvería a hacerlo?

Sin lugar a dudas. Soy de la opinión de que cada persona tendría que intentar hacer algo por sí mismo, cambiar la mentalidad y tomar conciencia de la de la situación. Todos podemos ayudar.