Edición

Borrar
Clúster de la construcción del Padul, con su estructura levantada con hormigón hueco.
Una patente granadina abarata hasta un 20% la estructura de los nuevos edificios

Una patente granadina abarata hasta un 20% la estructura de los nuevos edificios

Se basa en estructuras huecas de hormigón armado que ya se ha utilizado en obras como la clúster de la construcción del Padul

Jorge Pastor

Lunes, 12 de septiembre 2016, 00:31

Imagínese que va usted andurreando por esos campos granadinos. Y que se encuentra ahí, tirada en el suelo, una apetitosa almendra recién caída del árbol. Si tiene la tentación de descascarillarla y comer su pepita, deberá golpearla varias veces con una piedra. Golpearla con mucha fuerza. Pues bien, salvando las distancias, en esto consiste básicamente la fórmula patentada nacional e internacionalmente por el ingeniero Manuel Rojas. En la utilización de láminas de hormigón armado de cinco centímetros de espesor que, como si fuera una 'lábil' cáscara, generan un armazón ahuecado para forjados o fachadas. Un espacio que no tiene nada de 'muerto' porque se puede aprovechar para habilitar instalaciones como el agua o la luz y que optimiza también el aislamiento térmico de los inmuebles, lo que significa ahorro económico, por una parte, y también un mejor aprovechamiento de la energía, por otra.

El sistema se denomina técnicamente 'Elemento estructural de doble pared de hormigón armado' (Elesdopa) y, según los expertos, puede marcar un antes y un después en los métodos constructivos porque abarata hasta un veinte por ciento el coste de las estructuras, que representan a su vez el cuarenta por ciento del presupuesto de una obra. Aquí mismo, en la provincia, se ha utilizado el Elesdopa en proyectos como la terminal de pasajeros del Puerto de Motril, una iglesia en Playa Granada, un puente en Válor o el nuevo hotel Washington Irving. Son algunos ejemplos. Hay muchos más.

Estructuras autoportantes

También en el Clúster de la Construcción del Padul. Su arquitecto, Jorge Suso, explica que la espectacular cubierta de este edificio, habilitado como laboratorio para investigar nuevos materiales, centro de formación y también como vivero de empresas, se levantó con Elesdopa, «que permite moldear geometrías de gran complejidad que, debido a su menor peso, son autoportantes y se mantienen sobre sí mismas». «Es un elemento fuerte y con poca masa que, debido a su configuración, consigue aumentar el momento de inercia mediante la separación de las placas del centro de gravedad», comenta Suso. Todo ello permite unos paramentos de gran resistencia aplicando una menor cantidad de hormigón.

Y es que el coste es clave para un sector que está saliendo poco a poco de la crisis y que durante muchos años ha registrado unos niveles de actividad prácticamente anecdóticos -en consonancia con la paralización del mercado inmobiliario-. La gran ventaja competitiva es que el propio 'esqueleto' sirve también como cerramiento. Los tiempos de ejecución son similares a los convencionales, pero la finalización de la obra se anticipa hasta un treinta y cinco por ciento -los porcentajes son mayores cuanto mayor es el volumen edificado- porque las preinstalaciones de tubos en vacío y conductos se tiran por el propio hueco del Elesdopa, porque los espacios ya quedan cerrados y porque también se aminoran los periodos de fraguado. Todo ello reduce la participación de diferentes oficios, una circunstancia que se ve compensada en parte por la necesidad de una mayor mano de obra para las estructuras.

El negocio para los titulares de la patente radica fundamentalmente en la asistencia técnica que deben prestar a los constructores. Y es que el Elesdopa no se utiliza tan sólo para hacer casas, sino que también se ha demostrado su validez para el desarrollo de infraestructuras de ingeniería como puede ser un embalse.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

ideal Una patente granadina abarata hasta un 20% la estructura de los nuevos edificios