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El Fandi toreó el pasado día 13 en el Festival de Granada Down, que supone la principal fuente de ingresos de la entidad sin ánimo de lucro. Arriba, posa cerca de su casa.
«A veces te entregas más en una corrida benéfica que en Las Ventas»

«A veces te entregas más en una corrida benéfica que en Las Ventas»

David Fandila, 'El Fandi', empezó de novillero a colaborar con Granada Down: «El toreo y los niños están unidos. Hay que involucrarlos de pequeños. Todo es positivo. Lo viven con ilusión, les gusta jugar al toro. Les encanta que llegue la feria. Es muy bonito y muy normal»

Ángeles Peñalver

Sábado, 19 de marzo 2016, 01:33

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El Fandi anda perdido en su finca de Jaén y la escasez de cobertura hace que se necesiten dos días para poder cruzar las primeras palabras con el diestro. David responde amablemente a una entrevista que no protagonizan ni el diestro ni los toros. Estamos en el burladero y sólo vamos a hablar de su faceta solidaria. El pasado 13 de marzo, él toreó en el festival benéfico de Granada Down, después de más de 15 años seguidos colaborando con ese evento, principal sustento financiero de la entidad sin ánimo de lucro.

«Esta cita es un clásico que impulsó el maestro Enrique Ponce hace veinte años y en el que yo participé por primera vez como novillero, cuando tenía 18 años. Luego siempre he seguido. En mis primeros años de matador era un orgullo colaborar en una causa así y además con unos carteles impresionantes que me ilusionaban mucho. Ahora lo organizo a medias con Enrique Ponce y ningún compañero pone pegas en venir cuando lo llamamos. Cada año me gusta más, porque voy conociendo la labor de Granada Down y me entusiasma lo que hacen en la educación desde pequeños, en la inserción laboral o en los proyectos de vida independiente...», narra el diestro.

Cayetano y Finito

Llega el granadino a 'La Monumental del Frascuelo' un día después de haber toreado en la reapertura de la plaza de Morón de la Frontera junto a Fran Rivera y El Cordobés. Aquí, en su tierra, le esperan el rejoneador Manuel Manzanares, Finito de Córdoba, Cayetano, López Simón y el novillero Joselete. Aún quedan billetes para ver a amigos y figuras movilizadas por El Fandi sin mediar un euro entre ellos. «Es un esfuerzo y la organización del festival te roba tiempo porque a veces no es fácil. Pero todo se te quita cuando llegas a la plaza y ves el ambiente. Merece muchísimo la pena. Es la mejor manera de aportar un granito de arena».

¿Entonces los niños y los toros no son incompatibles?

Los toros y los niños están unidos, claro. Esto es una cultura en la que hay que involucrarlos desde pequeños. Siempre tiene su lado positivo. En este caso fíjate. ¿Tiene este festival alguna vertiente negativa? No. Todo es positivo. Los niños lo viven con ilusión, les gusta jugar al toro. Les encanta que llegue la feria y te cuentan su experiencia. Es muy bonito y muy normal.

David también colabora en el festival benéfico de Córdoba, de Jaén y en el de Murcia -desde hace 10 años- a favor de la Asociación Española contra el Cáncer. «En la medida de nuestras agendas siempre lo hacemos. Los toreros siempre hemos sido generosos y hemos puesto el oficio al servicio de muchas cosas benéficas. Sacar una buena tarde económica para otros es satisfactorio».

¿Y uno se da igual en un festival benéfico que en Las Ventas?

Bueno, a veces incluso más. El ambiente es mucho más relajado, vas con otra actitud diferente. Es un día para entregar y al mismo tiempo toreas un toro, por lo que te estás jugando la vida. El mismo porrazo te da un toro más chico que otro más grande. Pero independientemente de lo que te pueda aportar profesionalmente, en lo personal es una maravilla ver cómo disfrutan los niños. Esa satisfacción personal no se cambia por nada.

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