11 huertos para sobrevivir en Granada
Desempleados de Casería de Montijo cultivan patatas y verduras en terrenos ganados a las riberas del Beiro
JUAN ENRIQUE GÓMEZ
Martes, 6 de marzo 2012, 02:24
Los vecinos de Casería de Montijo que iniciaron las tareas de limpieza de las riberas del río Beiro no se conformaron con hacer caminos por ... los que poder acceder desde el barrio hasta el río y poner en marcha un conato de explotación agrícola. Ahora dos meses después, han roturado once pequeñas parcelas que han convertido en huertas con sus chozas de cañas y retamas, vallas de arbustos y canales para regar que utilizan el agua del río. Todo un complejo de cultivos tradicionales que ya da algunas hortalizas y que con el inicio de la primavera tendrá sus primeras cosechas.
«No ha sido fácil. El trabajo ha sido arduo y difícil, pero todos nosotros estamos deseando que se haga de día para venirnos al huerto», dice José Andrés Calvente, uno de los desempleados de la barriada que formó parte del equipo que inició las tareas de limpieza de las riberas y que ahora, «intento hacer algo para ayudar a mi mujer y a mis dos niños». Lleva algo más de dos años y medio en el paro. «Solo me queda la ayuda de los 400 euros», por lo que espera conseguir productos agrícolas para poder llevar a su casa. «De los 11 huertos se benefician ya 40 familias, que si se multiplica por cuatro cinco personas por familia, son mucha gente», dice uno de los impulsores de la idea, Santiago Cortés, que cada día trabaja la tierra, junto al río.
El objetivo fundamental es la subsistencia. «Lo hacemos para vivir, y qué mejor forma que plantando patatas, cebollas y tomates para nuestras familias, y para aquellos que lo necesiten en el barrio, porque no vamos a dejar a nadie que tenga necesidad sin una bolsa de patatas, o de lo que sea».
Inspección municipal
Inspectores municipales, de la Gerencia de Urbanismo, visitaron las explotaciones para conocer de primera mano qué se está haciendo en los márgenes del Beiro. Llegaban después de que una patrulla de la Policía Local, hace unos días, realizase una inspección y emitiese el correspondiente informe. Los inspectores informaron a los parados que estaban en sus cultivos, que para poder roturar y trabajar una tierra hay que disponer de permisos administrativos, además de la autorización de los propietarios de los terrenos. También es necesario disponer de análisis de las aguas que se utilizan para regar y de la composición de la tierra, ya que se va a plantar y cultivar productos que luego van a ser consumidos.
El principal problema que se ha encontrado es que se ha realizado una ocupación de tierras que son ribereñas, además de una alteración, por mínima que sea, del cauce y sus riberas, lo que va en contra de las normativas ambientales.
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