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El padre de la primera víctima mortal de gripe A en España grita tras conocer la muerte de su nieto Rayán.
Un «error terrorífico» mata al hijo de Dalila
SOCIEDAD

Un «error terrorífico» mata al hijo de Dalila

Una enfermera del Gregorio Marañón suministró por vena el compuesto lácteo para sonda nasal del bebé prematuro de la joven víctima de la gripe A

RAFAEL HERRERO

Martes, 14 de julio 2009, 05:42

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Rayán, el bebé sietemesino hijo de Dalila Mimuni, la primera víctima mortal por gripe A en España, falleció a las doce y veinte del mediodía de ayer a consecuencia de un «terrorífico error profesional», en palabras del director gerente del Hospital Gregorio Marañón, de Madrid, Antonio Barba, donde el pequeño prematuro permanecía internado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). El niño, que nació por cesárea a las 28 semanas de gestación hace quince días, uno antes de que muriera su madre, no estaba contagiado por la nueva gripe que acabó con la vida de Dalila, una joven de 20 años de origen marroquí. Rayán evolucionaba sin problemas en el centro médico, pero una trágica negligencia profesional acabó con su vida, tal como admitió el doctor Barba. El bebé falleció de una «embolia fulminante», según fuentes del centro sanitario.

El gerente del hospital madrileño admitió que «no hay excusas» ante el grave error sanitario y manifestó que la negligencia provino del «personal de enfermería». Al parecer, una de sus profesionales inyectó en vena al pequeño el medicamento lácteo con el que se alimentaba al bebé, cuando, como es habitual en los niños prematuros, debía suministrársele por sonda nasogástrica. Y ese modo de administración, el erróneo, «es incompatible» con la vida, dado que los bebés prematuros no tienen «capacidad de asimilación», subrayó el gerente, ya que sus órganos son muy pequeños y están poco desarrollados.

El «terrorífico» error profesional se registró al filo de las nueve de la noche del domingo. El personal médico se percató del terrible percance cerca de una hora después. Se activaron todos los protocolos y durante varias horas se estuvo intentando limpiar la sangre del pequeño y reanimarle, pero sin éxito, ya que ayer falleció. Según el gerente, el fallo es totalmente inusual, porque la alimentación láctea para los prematuros está «perfectamente tipificada» respecto a la vía por la que se tiene que administrar. «No da lugar a la equivocación, pero ha sucedido», dijo conmocionado.

Responsabilidades

El doctor Barba, visiblemente apesadumbrado, admitió que el centro sanitario y su cuadro directivo asumirán «todas las consecuencias», así como «todo tipo de responsabilidades humanas, morales, profesionales y patrimoniales» con la familia ante el luctuoso suceso, ya que se trata de «una gravísima negligencia que no tiene excusa». «Sabemos que hay cosas que no se pueden reparar, pero otras sí», añadió. Agregó que ante la polémica muerte de la madre se podía discutir si existió o no negligencia, pero con el bebé se ha tratado, dijo, de «un error profesional individual y gravísimo».

Barba comunicó que, tras el grave mazazo de la muerte de la madre y, ahora, la pérdida de la vida del bebe, «la familia está destrozada». Aseveró que, a título personal, comunicar la noticia a los familiares «ha sido uno de los peores momentos de mi vida profesional». El director gerente del hospital madrileño fue alertado del caso a las ocho de la mañana de ayer y, acto seguido, informó de la situación al consejero de Sanidad de la Comunidad madrileña, Juan José Güemes, que se quedó también sobrecogido por la fatal noticia.

Poco después se comunicó la desgracia al padre de la criatura y viudo de Dalila, Mohamed El Huarachi, que se encontraba de viaje, según confirmó Güemes. El consejero madrileño de Sanidad calificó de 'inexplicable' lo ocurrido, máxime cuando ha tenido lugar en una UCI «de la categoría» de la del Hospital Gregorio Marañón.

El centro médico madrileño ha abierto una investigación interna para aclarar lo sucedido en torno a esta gravísima negligencia, al tiempo que los servicios de Inspección de Sanidad de la Comunidad de Madrid han iniciado el expediente destinado a conocer cómo sucedieron los hechos y en quién recae del nefasto error sanitario. Barba precisó que la investigación interna del centro sanitario se pondrá en manos de un inspector de la Consejería de Sanidad, para que sea 'aséptica' y no puedan registrarse muestras de benevolencia. Aún así, ya adelantó que, «como es natural, la persona que lo ha hecho no se encuentra bien en estos momentos».

De momento, fuentes de la Consejería madrileña de Sanidad confirmaron que dos integrantes del personal de enfermería del Gregorio Marañón -al parecer, una enfermera y una auxiliar- han sido apartadas del servicio de manera cautelar, al tiempo que se ha puesto en conocimiento de la Justicia la grave negligencia registrada.

El viudo de Dalilah, así como el resto de los familiares, ya confirmaron a inicios del presente mes de julio que presentarían sendas querellas contra los hospitales Gregorio Marañón y de Fuenlabrada, ambos en Madrid, por una presunta negligencia médica que provocó, a su juicio, el fallecimiento de la mujer, que cumplió los 20 años de edad escasos días antes de fallecer. Ellos siempre negaron que la primera fallecida por la gripe A en España padeciera asma, como mantuvieron fuentes sanitarias, toda vez que era deportista y practicaba el atletismo.

Dalila Mimuni falleció después de permanecer 15 días ingresada en el Hospital Gregorio Marañón. La joven, según denunciaron sus familiares, había acudido hasta en tres ocasiones a diversos centros sanitarios con fiebre y dolores hasta que le diagnosticaron que estaba afectada por el virus de la gripe A. Para cuando comenzaron a tratarla, resultó ser demasiado tarde.

Investigación interna

La ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, trasladó sus condolencias a la familia del bebé, y «en particular a su padre», al tiempo que mostró su firme disposición a «apoyarles en todo lo que precisen». La ministra calificó la muerte del pequeño como «una noticia terrible», al tiempo que aseveró que «se ha intentado salvar su vida desde el primer momento».

La Asociación del Defensor del Paciente ha enviado un escrito al fiscal jefe de Madrid, Manuel Moix, para que abra una investigación sobre «la gravísima e incalificable negligencia médica» que ha provocado la muerte del bebé Rayán.

Asimismo, el Colegio de Enfermería anunció que ha creado una comisión de expertos para investigar «con absoluta transparencia» todas las circunstancias que han rodeado la muerte de Rián. En caso de que sentencie que, efectivamente, se deriva responsabilidad profesional o de carácter organizacional o institucional, la OMC «tomará todas las medidas de carácter deontológico aplicables a los hechos».

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