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TRABAJA DE 9.00 A 17.00 HORAS. Ana Feixas es la gobernanta, a su cargo tiene a todas las camareras de piso.
Abiertos hasta el amanecer
SOCIEDAD

Abiertos hasta el amanecer

La actividad nunca cesa en un hotel de cinco estrellas En turnos de día y de noche, los trabajadores satisfacen las impertinencias o necesidades de quien allí se aloja

ÁNGELES PEÑALVER

Sábado, 12 de abril 2008, 04:49

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ABIERTOS 24 horas. El engranaje de la maquinaria de un hotel siempre está engrasado... Si de madrugada comienza a caer agua a chorros del techo de la recepción de un hotel de cinco estrellas hay que buscar una solución inmediata. A veces, es tan fácil como que el recepcionista cierre el grifo de la bañera de un cliente borracho que ha decidido dormir en el baño. La situación se complica cuando el huésped -que había pagado más de 200 euros por noche- se empeña en seguir en la bañera con el agua corriendo. «Al principio, cuando entré en la habitación creía que el tío estaba muerto. Luego tuve que subir varias veces a cerrar el grifo, y él seguía tranquilamente, durmiendo en el baño», rememora Sergio Izquierdo, empleado del AC Santa Paula, de Granada.

Mozos, recepcionistas, camareras de piso, cocineros, limpiadoras... pendientes todo el día de las necesidades de sus huéspedes. En España hay dos millones de personas que empiezan su jornada laboral cuando los demás se van a la cama. Por la ciudad de la Alhambra se reparten unos 160 establecimientos de hospedaje, una veintena de 4 y 5 estrellas. Cada uno, en su categoría y con sus distintos servicios, son entes vivos que no pegan ojo ni de día ni de noche. Algo parecido a lo que ocurre en hospitales, periódicos, comisarías, aeropuertos y demás organismos que siempre están al servicio de los ciudadanos. En una sociedad de consumo, la producción no se para nunca.

Un lujazo

Para muestra, un botón. El convento de Santa Paula volvió a la vida en 2002, hasta entonces había permanecido más de veinte años clausurado y borrado de la memoria colectiva. Se convirtió en el primer hotel de cinco estrellas en Granada. Unos 50 trabajadores desembarcaron en este antiguo monasterio que hoy cuenta con cinco plantas donde se reparten 75 habitaciones, 9 de ellas individuales, 60 dobles y 6 suites.

Nos recibe en la puerta Juan Manuel Martínez, un joven mozo maletero que ahora hace el turno de mañana -de 7 a 15.00 horas-, pero que como los demás empleados del departamento de recepción ha tenido que trabajar en los turnos de tarde, de 15.00 a 23.00, y de noche, de 23.00 a 7.00 horas. Además de atender profesionalmente a los clientes, también hace algún favorcillo de vez en cuando. Cuando el presentador Juan Y Medio, que siempre viajaba con su perro, llegó al AC Santa Paula, se descompuso... «Aquí no se admiten mascotas», le dijeron. Pero Juan, amablemente, se encargó de ponerle al can una especie de caseta en el cuarto de calderas del hotel y de acompañar al famoso a recoger a su can cada vez que iba a salir del establecimiento. Gajes del oficio.

Cambia el ritmo de vida

«Quien llega a las 3 ó a las 5 de la mañana a un hotel o son reservas con aviso o son gente de paso. También cae alguna pareja que se quiere dar un homenaje improvisado», comenta Sergio Izquierdo, un recepcionista que encuentra incómodo trabajar de noche, aunque sea el turno más tranquilo. «Nadie puede contar contigo, te cambia el ritmo de vida», apostilla este empleado del sector servicios, en el que se incluyen la mayoría de los trabajadores nocturnos.

Si así lo decidieran, unos 12.000 turistas podrían venir a dormir a la ciudad a la vez. Son las plazas de hospedaje de las que dispone la ciudad de la Alhambra. Afortunadamente, no todos son como el señor que encontró Sergio en la bañera. Bruce Springsteen, por ejemplo, llegó, se quedó encantado con el hotel y fue muy amable con todo el mundo. El único ruido que dio el 'Boss' salió de su guitarra, que tocó durante un rato sentado en uno de los sofás del claustro.

Ana Feixas es la gobernanta del AC Santa Paula, el hotel donde decidieron alojarse desde el Nobel de la Paz Kofi Annan, hasta Michael Stipe, cantante de REM, pasando por los artistas Tom Jones, Plácido Domingo, Shakira y Alejandro Sanz, entre otros. Esta gobernanta tiene a su cargo a las camareras de piso, que mantienen la habitación a punto en cualquier momento del día.

Cuando las camareras de piso se marchan a las 23.00 horas, un mozo se encarga de los imprevistos que surgen hasta las 5.00 de la mañana, entonces la actividad vuelve de lleno a este convento, que recibe limpiadores de una empresa externa que se encargan de fregar las zonas comunes, también llamadas nobles.

En el claustro, en los pasillos y en el restaurante de este lujoso alojamiento se respira nobleza. Pero en la lista de objetos olvidados en las habitaciones son frecuentes las «revistas y artilugios pornográficos». «Joyas, anillos de oro con pedrería, collares de cristal Swarovski, perfumes, ropa... encontramos muchas cosas», añade Encarnación Guerrero, camarera de piso que asegura que aquí se trata con el mismo esmero a Mijaíl Gorbachov -que pernoctó en la suite del Obispo, en 2005- que a un ciudadano anónimo. En total, unas 30.000 personas duermen en estas habitaciones cada año. Los departamentos de administración y dirección, con Francisco Ruiz a la cabeza, son los encargados de supervisar una actividad tan frenética.

Y es que el frenetismo también tiene cabida en un claustro donde sólo se oye el agua borbotear... «Hay muchos nórdicos que ven normal estar desnudos cuando tú acudes a hacer tu trabajo. Te abren la puerta así, sin nada de ropa», comenta Encarnación Guerrero, la misma que le planchó las camisas a Gorbachov. «Luego lo vi en la tele y dije: '¿Esa se la he planchado yo!'», añade jocosa.

mapenalver@ideal.es

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