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Francisco Javier Capiscol, premio guitarra flamenca para jóvenes

Los guitarristas Jorge Espejo, de Cúllar Vega (Granada), y David Caro, de Almería, segundo y tercer galardón

RAFAEL VALERA

Martes, 26 de febrero 2008, 03:59

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La final del XI Concurso de Guitarra Flamenca para Jóvenes Intérpretes de la Diputación Provincial se presentó bastante peliaguda para el jurado, ya que los participantes demostraron su cualidades artísticas y su dominio del instrumento. Eso si, hubo determinadas circunstancias que nos inclinaron a valorar los toques por determinadas premisas: limpieza en la pulsación, dominio del instrumento, y sobre todo, la creatividad personal a la hora de elaborar e interpretar las piezas. Entre otras circunstancias porque no es lo mismo establecer los parámetros que otros han utilizado y compuesto -influencias de Paco de Lucía o Víctor Monge 'Serranito'-para ofertar su puesta en escena, que mostrar los propios, caso este último y con más solvencia de Francisco Javier Capiscol.

Abrió la noche flamenca Antonio Cáceres -en similar tesitura a la fase de clasificación- con rondeña y cierto apresuramiento, aunque mostrando limpieza y dominio del instrumento; en las alegrías constató su tesitura anterior con fases de guitarra para acompañamiento del baile. Por su parte, Javier Muñoz 'El Tomate' volvió a evidenciar su prestancia rítmica con el zapateado con alguna que otra imprecisión y un adecuado final; posteriormente dejó claro su sensibilidad en los trémolos y su capacidad para derivar alas bulerías con criterio personal.

El tercer premio, David Caro Torralba -a pesar de su juventud, 16 años- denotó unas inusuales calidades para establecer un toque enfocado a las escuelas clásicas por taranta, evidenciando la esencia del estilo; en la guajira definió con solvencia el toque con aires de 'Serranito', aunque con cierta preocupación por la dificultad compositiva del madrileño. En cuanto a Pedro Montesinos, éste reivindicó su zona natal -Guarromán- con un toque por taranta realizado con templanza y sonido flamenco, mostrándose limpio en el arpegio y dominando el traste; en las alegrías se alargó en la introducción y mantuvo la templanza, así como el adecuado ritmo y compás del estilo.

Jorge Espejo 'El Fresquito' también quiso homenajear a su tierra con una granaina sensible y flamenca -consiguió el segundo premio-, adobada de ciertas dosis de personalidad, versatilidad y buena pulsación, en la farruca evocó sones de 'El Niño Miguel', ejerciendo limpieza en el trémolo y manteniendo adecuada melodía y cierta evolución del estilo. En cuanto a Fran Capiscol (primer premio del certamen), significar su dotes compositivas en la malagueña, matiz flamenco, sonido limpio y con cierto perfeccionismo, aligerando el toque con precisión para derivar al aire abandolao. Otro tanto estableció en las alegrías, ofertando seguridad y conocimiento, al punto de ajustar las salidas para el cante y el baile.

Cierre

Clausuró el concurso el esteponés Paco Javier Jimeno con un toque pleno de poderío tonal y rítmico, demostrando sus marcadas tendencias hacia las facultades con pulsación definida y brillante ejecución. Tocó por malagueñas y verdiales, fandangos de Hueva con clásicos y potentes picaos, alegrías con velocidad rítmica y dominio del instrumento, y bulerías en una línea gaditana y de enorme dificultad con prestante final.

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