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IDEAL GENTE
Lunes, 12 de junio 2017, 10:45
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Jennifer Lawrence tardará en olvidar su último viaje en avión. La actriz regresaba de Louisville, donde había pasado unos días en compañía de su familia, cuando unos problemas con los motores de la aeronave obligaron a realizar un aterrizaje de emergencia en un aeropuerto de Buffalo, en el estado de Nueva York.
El jet privado volaba a 31.000 pies (unos 9.500 metros) cuando se paró uno de los dos motores. Cuando el avión inició la maniobra de aproximación al aeropuerto, falló el segundo y puso en una situación límite al piloto, que demostró su pericia tomando tierra sin grandes incidentes.
La artista, ganadora del Oscar a la mejor actriz en 2012 por 'El lado bueno de las cosas', salió ilesa del incidente con su avión privado, que finalmente, a pesar de que se desplegaron todas las medidas de emergencia en este tipo de situaciones, se quedó en un susto. Algunos colegas de profesión como Morgan Freeman o Harrison Ford también han vivo una experiencia similar.
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