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El rey Saudí deja Marbella para veranear en Tánger

El rey Saudí deja Marbella para veranear en Tánger

Su tercera mujer, Fahda no quiere visitar la Costa del Sol donde sigue siendo tan querida Sultana, la primera mujer de Salman

FRANCISCO APAOLAZA

Lunes, 30 de mayo 2016, 12:58

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Si el imaginario español guarda una escena del veraneo marbellí es la del yate de la familia real saudí atracado en Puerto Banús como si fuera una isla blanca, los deportivos por las calles y la aristocracia de aquel país gastando petrodólares como si les quemasen en las manos. Ahora esa imagen está en peligro por los celos.

A mediados de los años 70, el Rey Fahd eligió las costas andaluzas como su refugio lujoso y desde entonces, la aristocracia del país ha pasado allí los veranos y ha inyectado una buena cantidad de dinero a los comerciantes a base de un lujo desaforado. En 2005 murió el Rey Fahd y en los últimos años las visitas han ido espaciándose. Marbella era el lugar fetiche del actual rey, Salman bin Abdelaziz, que fue un personaje habitual de la Costa del Sol junto a su primera mujer Sultana y a los cientos de asistentes que les acompañaban. El año pasado, no visitó la zona y este año ha elegido otro lugar en Tánger para pasar sus vacaciones, según ha publicado 'ABC'. Se trata de Jbilia, una playa privada y un palacio de su propiedad que construyó en un terreno que pertenecía a Felipe González. Según las fuentes de la familia real saudí que cita el periódico, detrás del cambio está en la elección de su tercera esposa, Fahda, que no admite veranear en un lugar en el que la primera mujer de su marido fue un personaje tan querido. En efecto, Sultana, el primer matrimonio del rey Salman, fue una persona muy querida en la Costa del Sol y allí veraneó con sus hijos hasta que murió en 2011. Desde entonces, Salman se volvió a casar dos veces, la última con Fahda, que ha preferido esta vez alejarse de los recuerdos del viudo. Salman tiene hoy en día 80 años y pese a que su estado de salud se mantiene en secreto, se ha publicado que está aquejado de alzheimer.

Los príncipes se quedan

Salman tuvo seis hijos con Sultana. Dos de ellos murieron y una de sus hijas incluso se casó en Marbella. Dos de ellos, Sultan y Faisal, siguen escogiendo como lugar de vacaciones a Marbella, donde la familia tiene cuatro palacios, uno de ellos reformado por 120 millones de euros.

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