Cambio de ciclo al norte del Cinturón

Lo ha repetido su alcaldesa, Berta Linares (PSOE), en varias ocasiones. Maracena, uno de los feudos socialistas más sólidos de Andalucía –tiempo atrás fue bautizada como 'Rusia chica' por la notable presencia de simpatizantes comunistas– busca la «excelencia» en un nuevo ciclo político marcado por la salida de Noel López (PSOE) del Ayuntamiento.

En julio del pasado año, López, que devolvió al PSOE el mando de la ciudad tras cuatro años de gobierno municipal del PP –la única victoria en el palmarés popular–, anunció que dejaba el Ayuntamiento quince años después. Llegó al cargo en 2007 tras coser las heridas de un PSOE fracturado. Pasaron, sin rozarle, las crisis socialistas a nivel estatal y autonómico. Mantuvo su posición y pasó a ser uno de los barones del PSOE en Granada, hasta el punto de disputar la Diputación y la secretaría provincial del partido.

Hizo oficial su renuncia en julio del año pasado para dar el salto a Sevilla, como parlamentario andaluz –cargo incompatible con la alcaldía– y secretario de organización del PSOE en la comunidad. Entre sus últimos logros está la consecución del teatro, un espacio escénico que había empezado a tramitar décadas atrás. También las obras de la avenida Nuestra Señora de los Dolores, uno de los principales accesos a la ciudad metropolitana.

Tomó el testigo la que fue su concejala de Urbanismo Berta Linares, sucesora natural de Noel López que apenas ha tenido margen para apuntalar algunos de los proyectos que inició el alcalde tras la victoria (11 concejales, frente a los 4 de IU-UP, 2 del PP, 2 de Cs; 1 de PSLF y 1 de Vox).

El nombre de Berta Linares saltó a las páginas de sucesos de todo el país en el pasado mes de febrero. El día 21, la concejala Vanessa Romero fue secuestrada por un hombre que era pareja sentimental de la alcaldesa en ese momento. «No quiero volver a verlo más, no le perdonaré esto mientras viva y anuncio que me personaré en defensa de Vanessa como acusación el día del juicio», dijo en una entrevista a IDEAL. La causa sigue bajo secreto de sumario. Está por ver cómo puede afectar lo ocurrido –la noticia que adelantó IDEAL corrió como la pólvora por todos los medios– en los comicios.

Con estos precedentes, 17.088 maraceneros están llamados a elegir al próximo alcalde o alcaldesa, que se situará al frente de la nueva etapa de expansión de una ciudad que aún tiene margen de crecimiento –siguen vacíos, por ejemplo, los terrenos de Jimesa– y se enfrenta a necesidades como la ampliación de los servicios sanitarios. Tendrán que optar por una de las nueve papeletas que encontrarán en los colegios electorales.

Al frente de la lista del PSOE –sin Vanessa Romero– estará Berta Linares. Debutará por parte del PP Julio Manuel Pérez, hijo del único alcalde popular de Maracena. IU y Podemos, que fueron de la mano en los comicios de 2019, no repetirán la fórmula de coalición y concurrirán por separado. Al frente de la candidatura de Izquierda Unida estará Antonio Segovia. En Podemos será cabeza de lista María Grazia Córtese, que figuró como cuarta en la lista de la confluencia en 2019. En aquellos comicios obtuvieron representación el Partido Socialista Libre Federación –cuyo único concejal, Antonio Manuel Garrido, repite como número uno– y Vox –donde el que fuera el cuarto nombre en el listado, Juan Antonio Quesada, asciende a candidato a la alcaldía–.

Queda fuera del mapa político local Ciudadanos. La formación naranja irrumpió en los comicios de 2015, arañando 1.036 votos –un 11,41%– que le valieron para lograr dos asientos en el pleno municipal. Cuatro años más tarde, el partido que entonces presidía Albert Rivera calcó los resultados: 1.100 votos, un 10,85% de la tarta electoral. Con un pleno fragmentado con representación de seis formaciones, volvió a lograr dos concejales. El que fuera número uno de la formación naranja se ha unido como independiente, en el número cuatro, a la lista del Partido Popular de Maracena.

Al margen de los partidos con representación en el pleno, otras tres formaciones aspiran a defender la opinión de sus vecinos en el foro de una ciudad que, por incremento de población, llegada de nuevos servicios y cambio de ciclo político, está camino de una nueva etapa.