Honrubia: «Es el momento de que la izquierda seamos capaces de sentarnos y dialogar»
Aunque han perdido un 1,38% de votos, mantienen su escaño por la provincia
El pequeño Yue lleva toda la tarde acompañando a su madre en la sede de Unidas Podemos en Granada. Le habían dicho que habría comida ... y bebida, así que se acercó al local situado en la calle Acera de San Ildefonso para ver qué sería eso de la fiesta de la democracia. Y se encontró con que la gente a su alrededor solo hablaba de escaños, votos y escrutinios. Estaba aburrido, así que aprovechó que en el lugar había un equipo de televisión para dar rienda suelta a su imaginación. Así, sustituyó a la pantalla dispuesta en el lugar para seguir el escrutinio, que no dejaba de pararse a causa de la mala conexión a Internet, para dar su particular telediario.
Pero no fue hasta pasadas las diez de la noche cuando pudo dar la noticia definitiva: Unidas Podemos había conseguido mantener su escaño en Granada, que volvía a ir destinado a su número uno, Pedro Honrubia, aunque habían bajado un 1,38% los votos –han pasado de un 13,64% que lograron en las pasadas elecciones del 28 de abril a un 12,26% en la provincia de Granada-. Una caída que queda patente también en el número global de votos, pues en la provincia han perdido casi 13.000 votos. Lo mismo que ha pasado a nivel nacional, donde el partido liderado por Pablo Iglesias ha dejado por el camino siete escaños. «Tenemos una sensación ambivalente, porque estamos contentos con que en la provincia volvamos a tener un diputado, ya que Granada volverá a tener representación de la izquierda en el Congreso, pero también tenemos que mirar con preocupación que la decisión de repetir elecciones ha hecho que el partido de la corrupción, el PP, haya sumado 22 escaños más, y que Vox, ese partido de extrema derecha homófobo, racista, xenófobo y racista haya multiplicado sus resultados anteriores», indicó Honrubia.
Apenas habían pasado unos minutos desde la comparecencia de Pablo Iglesias, cuando Pedro Honrubia y el resto de su equipo salían de la sala privada en la que habían seguido el escrutinio de los votos separados del resto de militantes para dar su opinión sobre los resultados. «Estamos nerviosos, creemos que se va a mantener el escaño, pero no queremos aventurarnos a decir nada hasta que no se sepa nada definitivo», decía el cabeza de lista por Unidas Podemos momentos antes de que empezara el recuento. Cuando apenas faltaban unos minutos para que el reloj tocara las once de la noche, Honrubia salía sonriente de su sala refrendado por los aplausos de los cerca de veinte militantes que le esperaban ansiosos en la estancia principal de la sede. «Enhorabuena», «bien hecho», le gritaban mientras hablaba. Para Honrubia y el resto de su equipo, este era un momento de celebración, pero la noche seguía teniendo sus claroscuros, porque ponía de manifiesto el crecimiento del bloque de derecha en el territorio nacional. «No se ha conseguido ninguna mayoría absoluta, así que es el momento de que la izquierda seamos capaces de sentarnos y dialogar para darle a la población las políticas estables que se merecen si no queremos que en España vivamos una sorpresa que nadie quiere tener», indicó. Durante su discurso, Honrubia agradeció a los apoderados y militantes su apoyo en estas elecciones, y tendió su mano a la formación de Más País para «llevar políticas sociales al Parlamento».
Y tras sus palabras, todo eran llamadas de teléfono para felicitarle por su escaño y apretones de manos entre los presentes por haber conseguido que la caída no fuera tan pronunciada como preveían los sondeos. Y a los pocos minutos, el silencio se hizo en la sala. La mayoría de los presentes en el lugar abandonaron la sala para festejar en casa o en otros lugares de la capital. Una quietud que solo se rompió tras hacerse público que Albert Rivera convocará un congreso, pero sin dimitir. «Con Rivera no», gritaban animados a las puertas de la sede. Hoy es día de festejar, pero también de sentarse a pensar cómo formar un Gobierno de izquierdas. Hoy empieza su lucha por quitar los nubarrones en esta noche de claroscuros.
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