Rajoy compara a Podemos con los bolcheviques y arroga al PP el único voto útil
Juanma Moreno llama a los votantes del PP a hacer proselitismo y convencer a los 'cabreados' de su alternativa de cambio
Miguel Cárceles
Viernes, 6 de marzo 2015, 21:11
En los bajos del ambulatorio Norte de El Puerto de Santa María tiene la sede la asociación de vecinos Barrio Obrero. Un lugar en el ... que los portuenses se juegan la suerte de quién paga el café al dominó. Al entrar Juanma Moreno, candidato del PP a la Presidencia de la Junta, un resuelto septuagenario tumba sus fichas, se alza enhiesto y le señala con el dedo. «Yo siempre he votado al Partido Popular, te lo pueden decir ellos que lo he dicho antes de que entraras. Pero me habéis decepcionado». Moreno, que se está curtiendo en las lides taurinas, saca el capote. «Yo no, dame una oportunidad, y si te decepciono, ya nunca más». Moreno ha encontrado en las calles de Cádiz, primero en San Fernando y después en El Puerto, una realidad que se toca con las manos y que es, precisamente, la que se afana en combatir el PP: el desaliento y la opción de cambio por las terceras vías.
Por ello, en las escasas horas de campaña que han pasado, el mensaje que se ha repetido de forma constante se dirige a polarizar las posibilidades de voto en dos modelos: el socialista (a cuya órbita suman otras fuerzas emergentes como Ciudadanos) o el suyo. Y a Podemos, terceros en discordia, les definen como un partido «surgido en platós de televisión» y «con sede fuera de Andalucía». Ayer lo explicaba así Juanma Moreno en un mitin en el pabellón jerezano José María Ruiz Mateos, con el apoyo explícito de Mariano Rajoy y ante la euforia de 2.500 populares convencidos de la provincia de Cádiz. El presidente del Gobierno fue aún mucho más gráfico, y tras pedir el cambio en Andalucía «aunque solo sea para hacer lo que es normal en democracia», llegó a comparar a Podemos -sin citarles, como es su costumbre- con los bolcheviques rusos. «El cambio no son los doctrinarios de 1917 ni la nada. El cambio es el PP», arengó Rajoy.
El de ayer fue uno de los cinco actos que el presidente tiene previsto ofrecer en Andalucía. Descartan que su presencia pueda restar a las expectativas electorales del PP. Más bien al contrario, encuentran en ella un elemento de movilización de su electorado natural, el que le aupó hace tres años a la amarga victoria. Y por ello se permiten bromear con el comportamiento de sus principales adversarios, los socialistas, que apenas contarán con Sánchez en dos de los actos de campaña. «A mí no me piden como a otro el pasaporte para venir a Andalucía, estoy en mi casa», dijo Rajoy.
Expectativas electorales
Pero las cifras, según las encuestas, no cuadran para las expectativas electorales del PP. Moreno echó cálculos al aire y defendió que en el actual escenario de dispersión del voto, arrancar el mismo número de apoyos que en 2012, cuando Arenas acarició las puertas de San Telmo, haría posible que se le abrieran para él el 22 de marzo. Y por ello, animó a los simpatizantes populares a hacer proselitismo, a convencer a familiares y exvotantes del PP. «Os pido que les trasladéis este mensaje a quienes han confiado en el PP, que depositen de nuevo su confianza. Somos la única alternativa de cambio. Si lo hacemos con todos esos ciudadanos de hace tres años, lo conseguiremos».
Moreno anunció por la mañana planes de infraestructuras sanitarias y educativas. En San Fernando, se comprometió con la elaboración de un plan de infraestructuras escolares que permita eliminar las más de 300 aulas prefabricadas instaladas en colegios andaluces en un plazo máximo de tres años. Y en El Puerto de Santa María prometió un nuevo mapa sanitario que defina los centros de atención necesarios para una sanidad «de primera» tras destacar los más de 20 hospitales «fantasmas» existentes. Además de prometer paralizar la polémica fusión de centros hospitalarios iniciada por el SAS, conocedor del descontento que ha generado en la amplísima plantilla sanitaria andaluza. Cuenta con fondos europeos ahora que el dinero escasea. En todos sitios, no solo en la Junta. Y si no, pregúntenle al atrevido vecino portuense. «¿No traes ni un bolígrafo ni nada?», le inquirió. «Estamos tiesos esta campaña», le confesó Moreno.
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