Los granadinos que venden pintura y maquinaria a toda España

La empresa nació en noviembre de 1981 en Motril con la inauguración de su primer local. En 2024 cuentan con varias tiendas en Granada, Málaga y Almería. Hace un mes inauguraron en el polígono Juncaril (Albolote) una nave industrial con más de mil metros cuadrados. En las nuevas instalaciones cuentan con zona de tienda, almacén, exposición de maquinaria, despachos y salas de reuniones.

Grupo Reyma se divide en dos sociedades: Revestimientos y Maquinarias SL y Pinturas y Maquinarias SL. Las diez tiendas y almacenes están repartidos por Granada, Motril, Almuñécar, Málaga, El Ejido, Órgiva y Roquetas del Mar. La familia Álvarez nació en Vélez de Benaudalla y hace cuarenta y tres años que inauguró su primera tienda. Fue en noviembre de 1981, en Motril, como se ha indicado, con la inauguración de su primer local el punto de salida. En ese espacio, situado en la entrada de Motril, Grupo Reyma ha trabajado y dirigido el negocio durante casi 43 años. Ahora, han decidido centralizar, paulatinamente, la actividad de la compañía en la nueva nave industrial que han inaugurado en el área metropolitana granadina.

La empresa fue creada por dos socios, uno de ellos familiar de Julio. Después han ido abriendo sucursales y creciendo adaptándose a todos los tiempos. En Granada ya estaban presentes desde hace siete años con una pequeña tienda en el barrio del Zaidín. Durante estos años han ido creciendo y la infraestructura se les quedó pequeña. Fue, entonces, cuando decidieron inaugurar en el polígono Juncaril su nueva nave. «Estas instalaciones simbolizan nuestra clara apuesta por la ciudad y los pasos hacia donde se quiere dirigir la compañía. Nuestra intención es convertir esta nave en nuestra sede central desde la que daremos servicio al resto de localidades», concreta José Antonio Álvarez.

En la actualidad cuentan con más de treinta trabajadores. Algunos de ellos han trabajado en Reyma durante treinta años y son «sin duda, parte de la familia». También hay trabajadores que son familia de sangre de los Álvarez, tíos y primos. Desarrollan su actividad diaria en las instalaciones presenciales en las provincias de Granada, Almería y Málaga. Sin embargo, hace unos años crearon su ecommerce: Nosolopinturas.com. «Gracias a nuestra apuesta por la digitalización y los canales de venta online hemos aumentado, significativamente, nuestra clientela llegando a toda la península», resume Álvarez. En tan solo cinco años ofrecen más de 3.000 referencias de productos y cuentan con más de setenta clientes nuevos mensuales de media.

Tienen un perfil de clientes muy variado: empresas multiservicio, pintores profesionales, constructoras, carpinterías, lacadores, empresas especializadas en tareas de mantenimiento, montadores e incluso hoteles. «Nuestra actividad principal es la distribución de pinturas, suelos y maquinaria. Aún así nuestro objetivo es prestar el mejor servicio y acompañar a nuestros clientes en su crecimiento y expansión por el territorio», describe José Antonio Álvarez.

Los Álvarez saben bien que trabajar con la familia tiene sus ventajas y desventajas. «Acordamos que para que existiese un relevo generacional exitoso era necesario conocer todas las tareas y funciones que se llevan a cabo en la compañía. Es decir, empezar desde la base e ir asumiendo, poco a poco, nuevas responsabilidades».

Al principio, este sistema fue complejo para José Antonio Álvarez, hijo, quien tuvo que desempeñar en muchas ocasiones tareas en las que no se había especializado durante su carrera académica y profesional. Aún así, este sistema ha demostrado ser válido y exitoso. José Antonio Álvarez pronto se dio cuenta de las grandes oportunidades del sector y adquirió una visión holística del funcionamiento del negocio, lo que ha permitido «implementar nuevas herramientas y mejorar procesos», detallan desde la empresa.

El sector de las pinturas, suelos y maquinaria es complejo. Y deben conocerlo todo. «Hay una gran competencia con intensas luchas de precios, con cada vez más fabricantes que deciden vender al cliente final y con grandes empresas con las que es difícil competir», relatan desde Grupo Reyma.

No obstante, sigue siendo un sector «muy tradicional en el que hay una gran oportunidad para innovar y diferenciarte de tus competidores. No ya sólo en el precio sino en el valor que aportamos a nuestros clientes». A lo que hay que añadir que «en este tipo de sectores tan tradicionales estamos convencidos de que los primeros que deciden apostar por la innovación y la digitalización son los que, a la larga, se acabarán convirtiendo en los líderes del mercado». Ellos han ido adaptándose al mercado y su objetivo es innovar, evolucionar y ser cada vez más competitivos. Las claves del éxito de Grupo Reyma han sido «la constancia, el sacrificio y, lo más importante, la honestidad». Ahora, el relevo generacional está en marcha con buenas perspectivas.