«Carreras como esta nos ayudan a dejar de ser invisibles»

Los organizadores cumplieron así con el principal objetivo. Se abre la prueba para que cada día sean más deportistas quienes se acerquen a conocer a afectados por esta enfermedad 'invisible'. «Una persona afectada por esclerosis múltiple no manifiesta sus síntomas con la ayuda de un bastón o una silla de ruedas hasta que la enfermedad ha evolucionado bastante. Por eso, carreras como esta nos ayudan a dejar de ser invisibles, a mostrar nuestras necesidades», decía Félix Bravo, uno de los organizadores de la carrera.

Acudieron doscientos participantes, casi la mitad corredores federados y el resto amigos de la Asociación Granadina de Esclerosis Múltiple (AGDEM). «A quienes nos acompañan, les contamos de la necesidad que tenemos de concienciar al resto de la sociedad que algo tan habitual como andar y correr, para los afectados por esclerosis, es muy complicado», aseveraba Bravo, quien como cada año acompañó a los paseantes de la marcha andarina.

La cita tuvo lugar un año más en Armilla, con salida a las siete de la tarde del sábado pasado desde las inmediaciones del campo de fútbol Machado Villar. Para los amigos de AGDEM, el día se celebra como una fiesta a la que acudes para saludar a los amigos que ves de año en año. «Entre nosotros nos conocemos y este día aprovechas para saludar a los miembros de la asociación, pero también a los que no. Porque que hayan acudido deportistas para competir por sus marcas ha sido muy importante. Sabemos que el calendario de actividades solidarias y deportivas es muy grande, y que ellos hayan hecho un hueco para acompañarnos, es de agradecer», afirma el organizador, ponderando que «este tipo de citas son las que nos permiten hacernos visibles. Y lo hacemos con esfuerzo, con la ayuda de bastones, con sillas de ruedas o con motos 'scooter'. Son las mil caras que presentan nuestra enfermedad», advierte.

La esclerosis múltiple es una afectación del sistema nervioso central. Se manifiesta cuando aparecen limitaciones al movimiento desde el tren inferior y avanza no sólo con problemas de ambulación, sino también de equilibrio. Las horas de descanso por la noche apenas se dejan notar y por la mañana el afectado se despierta con una fatiga incomprensible. Es una enfermedad que cada día se detecta en una población más joven, con una edad de diagnóstico de 35 años de media. Desde AGDEM señalan los problemas de sensibilidad, cognitivos y de memoria, por lo que para los universitarios se convierte en un problema añadido a los de movilidad. En España la tienen más de 47.000 personas y según cifras de la Asociación Española de Esclerosis Múltiple, el 70 por ciento de los afectados son mujeres, con una tasa de entre cuatro y ocho nuevos casos entre cada diez mil habitantes.