La segunda mitad le vale al Jaén FS para llevarse los puntos de Segovia

El encuentro arrancó con un juego poco prometedor para el espectáculo. Ambos equipos querían tener el control de la pelota pero solo la puede tener uno. Ninguno fue capaz de imponerse al otro y eso que ambos emplearon presión a toda pista, y el resultado fue una amalgama de precipitaciones, imprecisiones y balones rifados que aburrió al escaso público asistente al Pedro Delgado. Se estrenaba parquet pero no tuvo una inauguración con un fútbol sala brillante, al menos en el primer tiempo.

A pesar de lo trabado del partido y de la falta de ritmo del mismo, poco a poco el Jaén Paraíso Interior FS se fue haciendo con el control del choque y se hizo con la posesión. Tanto fue el control sobre la pelota y tan escasas las ocasiones de gol que aparecieron fantasmas de la semana pasada, cuando el equipo no supo transformar todo ese dominio en goles. Carlitos trató de poner remedio a la situación, siendo uno de los más activos en ataque y sacando su zurda a relucir en varias ocasiones. De hecho la insistencia del gaditano comenzó a esculpir la figura del héroe del partido para el Naturpellet Segovia: Thiago Soares. Solo la actuación del portero brasileño impidió que su equipo se fuese antes del partido y es que cuando uno es colista con solo un punto en lo que llevamos de temporada es por algo.

Los jienenses pusieron a prueba al cancerbero local en varias ocasiones en el final de la primera parte. Rafa López tuvo una inmejorable llegando a rematar a bocajarro una jugada de estrategia en la que Thiago se encontró el balón impactado en su pecho y Jordi Campoy tuvo otra después de un caracoleo especialidad de la casa que acabó con disparo con la diestra y mano del arquero. Los fantasmas se hicieron aún más visibles cuando en el último suspiro de la primera mitad Álvaro confirmó de nuevo la máxima de que si perdonas lo acabas pagando. Fue bueno el contragolpe segoviano que terminó con su mejor jugador disparando a portería vacía.

Menos mal que Dani Rodríguez sabe lo que hacer en los descansos porque el equipo que salió del vestuario del Pedro Delgado en la segunda mitad poco se parecía al de la primera. Intensidad, atrevimiento a la hora de encarar y profundidad. Y un Dani Martín que al fin empieza a aparecer, clara está. Ya había avisado Carlitos de que la victoria seguía siendo un objetivo primordial cuando exigió de nuevo lo mejor de Soares para que no llegase el tanto del empate.

La sensación de peligro era mucho mayor y constante a favor de los jienenses y esta vez sí le funcionó el desatascador a Dani Rodríguez. Llevaba poco en pista cuando Dani Martín sacó el látigo a relucir. Fue tremendo su zapatazo desde la frontal. Le quitó las telarañas a la escuadra de la portería segoviana y convirtió el encuentro en una granizada de ocasiones a favor de los amarillos. Fue más fluido el ritmo del choque y esto benefició a los jienenses que no tardarían ver la remontada en el luminoso.

Deben agradecérselo a Rafa López que elevó un punto más, si es que se podía, la presión sobre la salida de balón rival. Consiguió recuperar el esférico frente al área de los blancos y tuvo la habilidad suficiente como para driblar en su salida de Thiago. Solo le quedaba empujarla y ante esa circunstancia un jugador de su calidad y de su experiencia no se pone nervioso.

Con el marcador a favor se envalentonó todavía más el conjunto jienense. Hasta Ramon, que hizo un partido mediocre como mucho, fue capaz de conectar un disparo potentísimo que hizo restallar el larguero de la portería local. Estaba noqueado y sobre la lona el Naturpellet y el Jaén FS lo ajusticio con una obra maestra. Emuló Míchel a Iniesta en banda izquierda para marcharse por la izquierda y cuando parecían habérsele cerrado las vías para progresar, se sacó de la chistera un pase raso con el exterior que dejó totalmente solo a Dani Martín en el segundo palo.

La puntilla a la victoria la puso Iker. Demostró el portero madrileño del Jaén Paraíso Interior FS que está a un nivel suficiente como para discutirle la titularidad a Espíndola y como para dejar en el dique seco a Segovia en cinco minutos de portero-jugador en busca de al menos un punto que no llegó.