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JESÚS MUDARRA
JAÉN
Lunes, 15 de octubre 2018, 00:49
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Debía ganar el Atlético Mancha Real en San Pedro de Alcántara para que no se escapasen los puestos de arriba y lo hizo. Genial el partido que cuajaron los verdes en tierras malagueñas a pesar de que el destino parecía empeñado en que las cosas se pusieran cuesta arriba para ellos. Enseñó de nuevo su buen fútbol el equipo de Rizos y también su carácter.
Gracias al primero de ellos la primera mitad se convirtió prácticamente en un monólogo visitante. Se bailaba al son que querían los mancharrealeños con un Manu Castillo que de nuevo sería la estrella entre los suyos. La movilidad que ofrece este ariete se ve multiplicada con los espacios que generan sus compañeros y esto se ve traducido en una especie de omnipresencia del delantero en todas las jugadas de ataque de su equipo.
Por desgracia para los jienenses, a pesar del control empezaron perdiendo en el choque. Un balón robado en la medular terminó en contragolpe y diana de Rubén Cervera, aunque esto no varió ni un ápice las intenciones de los verdes. Siguieron siendo dueños y señores de lo que acontecía sobre el tapete.
Paredes respondió a la titularidad que le dio Rizos de forma sobresaliente y le puso un centro medido a Manu Castillo para que obtuviese ese gol que ya había merecido y buscado en un par de ocasiones. Se llegó con empate al descanso.
Y tras él fue aún más descarada la intención de los verdes de llevarse tres puntos de San Pedro de Alcántara, aunque de nuevo le tocaría remar a contracorriente. De penalti anotó Álvaro Olmo para poner por delante de nuevo a los malacitanos.
Este gol sí escoció entre las filas verdes pero en vez de pesimismo estas se impregnaron de rabia y una energía renovada que acabaría siendo decisiva para llevarse el partido. Estaba haciendo daño el Atlético Mancha Real, era cuestión de materializarlo y no conceder.
Entró Juanlu y el equipo obtuvo más profundidad si cabía. El cancerbero Joki se estaba erigiendo como estrella de los suyos hasta que Garrido puso fin a la fortuna que habían tenido los malagueños. Soberbio su testarazo al preciso centro de Manu Castillo para hacer el dos a dos. Había tiempo, 15 minutos.
Le sobraron diez al Atlético Mancha Real para culminar la remontada y lo hizo de la mano de un futbolista que está pidiendo protagonismo a base rendimiento. Soberbio de nuevo Albertillo que de nuevo se sirvió de una asistencia de Manu Castillo para hacer el tercero y dar un empujón moral a su equipo.
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