El Leyma Coruña trae la cuenta pendiente de la LEB Oro
Liga Endesa ·
El Covirán truncó su sueño de ascenso y ahora en la élite se cruzan por primera vez con las fuerzas equilibradas
El adversario de este sábado en el Palacio de los Deportes del Covirán Granada, con motivo de la octava jornada de la Liga Endesa, es ... un viejo conocido. Se trata del Leyma Coruña, representante gallego que se estrena en la máxima categoría, pero que coincidió con la formación granadina en la segunda división, la LEB Oro llamada entonces. De allí existe una gran rivalidad. Los coruñeses traen una cuenta pendiente, dado que los nazaríes truncaron su sueño de ascenso la temporada que sólo subió un equipo por el reajuste de la ACB, fue el Río Breogán de Lugo. El Leyma no puede olvidar fácilmente aquella eliminatoria de semifinales en la que le tocó el Covirán en desgracia. Los granadinos competían como campeones de la liga regular y superaron a los herculinos, pero en una ronda muy igualada, resuelta a tres partidos en Granada. Reñida al máximo, decidida casi por una canasta.
Como pasó luego en la final, cuando Lluís Costa gozó de un triple para buscar la prórroga y hacer el 2-0 al Breogán en el Pazo dos Deportes. Entonces los lucenses dejaron a los hombres de Pablo Pin con la miel en los labios. Algo así como hicieron los granadinos con el Leyma, que formó una plantilla más potente desde el punto de vista físico, energía y músculo, aunque que cayó rendida al talento de los Bropleh y compañía. El Leyma se adelantó (67-77) con 20 puntos de Peña. Empero, los de Pin igualaron en Riazor (82-85) y 25 puntos de Thomas, para rematar en Granada: 72-68 y pese a la voluntad de Monaghan desde siete metros.
De los diez enfrentamientos entre ellos, el Covirán suma seis victorias y el Leyma, cuatro. Todos esos choques se disputaron en poco más de tres años, entre 2018 y 2022, en LEB Oro. Esa rivalidad relativamente reciente se revivirá este sábado, desde las 18 horas, en la ACB con un duelo directo por la permanencia. El equipo de Pin dispone de un triunfo, es colista y no ha ganado todavía en su pista. Pero tampoco el Leyma ha conseguido hacerlo lejos de su afición. Solo tiene un triunfo más. Dio la campanada al vencer al campeón Real Madrid en la primera jornada, en el debut, algo insólito, con emotivo triple de Barrueta, además de imponerse en un buen partido al Zaragoza (110-86), también en casa.
Derrotado en las salidas
Por lo demás, plantó batalla al Unicaja (83-90), pero las otras cuatro derrotas fueron rotundas y sin opciones: Tenerife (62-87) en su pista, y Andorra (112-87), Barça (106-80) y Gran canaria (80-72) fuera. Ante La Laguna se le hizo largo el partido.
Cuenta con un quinteto de calidad y experiencia, de jugadores veteranos a los que el físico y la defensa les cuesta más, algo corto en rotaciones y profundidad de banquillo, por lo que el desgaste en los encuentros lo sufre.
Taylor, Philip Scrubb, Barrueta, Thompkins y Lima es un 'cinco' quizá de más nombre que el del Covirán, dirigido por Diego Epifanio, verdugo del Covirán en aquel ascenso del Breogán de doloroso recuerdo cuando la pandeminia.
Jakovics y Hernández dan relevos en la dirección en pista, Lundqvist y Font a Scrubb, Figueroa se turna con Barrueta, Burjanadze ejerce para el descanso de Thompkins, mientras que Lima –que jugó en las filas granadinas– reparte los minutos con los 'cincos' Huskic y Diagne.
El Leyma, tras subir, mantuvo el bloque de la LEB compenetrado y fichó a cinco tipos curtidos en ACB como titulares –Brandon Taylor (Manresa), Phil Scrubb (Bahcesir), LJ Figueroa (Ratiopharm Ulm), Trey Thompkins (Zenit) y Augusto Lima (Unicaja)– en un caso muy parecido al Covirán debutante.
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