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Juanjo Martín
Sábado, 15 de diciembre 2018, 02:02
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«Al loro, que no estamos tan mal». La frase que popularizó hace una década el entonces presidente del Barcelona Joan Laporta podría entonarla ahora Pablo Pin. Su Covirán ronda la zona media de la tabla en LEB Oro, con un balance de seis victorias y seis derrotas que le colocan en la novena plaza y que, de acabar la Liga ahora, supondría su pasaporte para los 'play offs'. Eso sí, los nazaríes marchan empatados con otros cuatro equipos y sólo el mejor 'average' general le permite estar por delante de Valladolid, Canoe y Palma, precisamente el rival de esta jornada.
«Tenemos claro que por pequeños detalles se nos escaparon las victorias ante Oviedo y Huesca y no nos conformamos. Eso sí, tampoco debemos fustigarnos porque si lo analizamos fríamente estamos bien, jugando a buen nivel. No podemos caer en la complacencia porque hay jugadores que pueden hacerlo mejor, pero el vaso lo veo medio lleno», asegura sin ambages el técnico en las horas previas al viaje del Covirán a las islas Baleares.
La expedición rojinegra parte esta mañana en avión rumbo a Mallorca, donde pasará noche con tal de afrontar en las mejores condiciones posibles el duelo dominical (18.30 horas) frente al Iberojet Palma. La entidad balear figuraba en la mayoría de quinielas para los candidatos al ascenso y aún tiene tiempo de sobra para remontar el vuelo, si bien necesita hacerlo cuanto antes para no distanciarse mucho de la zona noble de la clasificación.
«Palma tiene una gran plantilla y en la segunda vuelta seguro que experimentará un subidón impresionante, pero ahora mismo está como nosotros», recuerda el técnico granadino, quien asevera que «debemos ir con la idea de explotar nuestras posibilidades, los aspectos en los que creemos que tenemos ventajas, y ser ambiciosos sobre sacar la victoria».
Pin no esconde la gran dificultad de vencer «en uno de los campos más complicados de la Liga», una misión que ya abordaron con éxito tanto Valladolid y Araberri semanas atrás. De ahí que exista cierto optimismo sobre las opciones de triunfo del Covirán en el compromiso de mañana. «Ellos poseen un equipo de enorme talento y sobre eso nos hemos concentrado en los entrenamientos. Tenemos que ser capaces de encadenar acciones positivas de forma continuada para no sufrir altibajos en los partidos».
El entrenador insiste en la relevancia de enhebrar buenas jugadas debido a que «somos capaces de lo mejor y de lo peor en apenas unos segundos. Sobre eso hemos metido mucha caña durante esta semana. También le hemos dado una vuelta al ataque a fin de buscar espacios diferentes. A veces en los sistemas se dejan de hacer pequeños gestos y la acumulación de ellos es lo que te lleva a hacerlo bien o no» en cada posesión. El preparador admite que «necesitamos seguir mejorando y encontrar buenas posiciones de tiro, porque el otro día ante el Betis tuvimos malos porcentajes», siendo especialmente doloroso el 11/36 firmado en los tiros de tres.
Además de crecer en cuanto a la eficacia a la hora de mirar el aro, Pin considera que una de las claves en el encuentro de mañana en Mallorca será imponer el ritmo. «A Palma le interesa un choque de anotación alta porque posee jugadores con mucho talento ofensivo, entre ellos Fran Guerra que, para mí, es uno de los mejores pívots de la LEB Oro junto a Stainbrook (Betis). En cambio, a nosotros nos va mejor plantear un partido de intensidad. Ahí tenemos más opciones de ganar, así que a ver quién se impone».
Vencer mañana permitiría restar tensión a un Covirán que aún no conoce el triunfo en el mes de diciembre tras su racha abierta de dos tropiezos –Valladolid a domicilio y el líder hispalense en el Palacio– que le han impedido continuar progresando en la tabla. En las cábalas de los nazaríes aparece el duelo ante el colista Prat de la próxima semana como seguro de vida para levantar la moral. Sin embargo, lo más aconsejable es no depositar todas las fichas en la misma cesta y sacar cuanto antes alguna victoria como visitante, por mucho que los contrincantes sean de elevada talla, como es el caso de Palma, Bilbao (día 30) y Palencia, ya en enero.
De hecho, en las cuentas de Pin de aquí al final de la primera vuelta aparecen tanto los triunfos en casa sobre Prat y Cáceres –que califica como «obligados» por ser en el Palacio– como «una o dos victorias para acabar con 9-10 triunfos y completar así un muy buen trabajo. Sería impresionante si sacamos esas victorias y por eso debemos ir con ambición a Mallorca». El técnico contará una vez más con todos sus efectivos, una vez que Iriarte ha superado un proceso febril que le ha tenido 'ko' un par de días. El ala-pívot podrá así enfundarse el traje de anfitrión en su regreso a casa, un desplazamiento a las Baleares del que el Covirán espera retornar con una enorme sonrisa en su rostro.
Félix Alonso, entrenador leonés del Iberojet Palma, es consciente de tener a sus órdenes a uno de los transatlánticos de la categoría, que sin embargo hasta el momento no está al nivel que se esperaba a inicio de temporada. Así al menos se lo reconoce a IDEAL antes del partido de mañana. «Evidentemente no esperábamos estar donde estamos. Somos conscientes de la dificultad de esta Liga, más en este año que el nivel ha subido, y aun sabiendo eso, esperábamos estar en otra situación, no sólo por las expectativas sino porque hemos hecho una plantilla para jugar mejor y haber ganado más partidos», afirma, argumentando que su equipo no es de momento «el equipo que quiere ser» debido en un buena medida a que «somos muy irregulares, no sólo entre jornadas sino dentro de un mismo partido», afirmando que «debemos resolver eso cuanto antes».
El proyecto balear este año es muy ambicioso. El lema de su campaña de abonados, '¡Queremos ACB!', así lo indica. Y sin embargo, Alonso no recurre a lugares comunes típicos de los entrenadores para descargar los ánimos: «Ese eslogan puede volverse en nuestra contra porque genera presión añadida sabiendo que hay proyectos como Betis, Bilbao, Palencia, Melilla u Oviedo que también quieren subir. Dicho eso, si dijera que el equipo está donde debe, sería un hipócrita».
El Iberojet comenzó la temporada con sólo tres victorias en ocho jornadas, para luego sumar tres triunfos seguidos, antes de volver a las andadas en la última jornada en Melilla. «Hicimos un partido desastroso, y eso es lo que no puede ocurrir en ningún caso. Dio la sensación de que no nos jugábamos nada, como si los objetivos estuvieran cumplidos. Sólo al final fuimos capaces de reducir la diferencia a base de testiculina, pero sin opciones ya», recuerda el entrenador. Ante tal tesitura, el partido de mañana en Son Moix es muy importante para los baleares, que no quieren verse lejos del objetivo mínimo que es jugar los 'play offs'. «Para el Covirán no sé, pero para nosotros habrá ansiedad si perdemos. Contra Cáceres jugamos en casa cuando íbamos con balance 3-5 y la tensión se cortaba con hilo dental, dentro del equipo y en el entorno. Es un partido de enorme importancia, más jugando en casa. No miro tanto la clasificación, pero sí que nos pondría en balance positivo y quiero que lo antes posible haya un pequeño colchón en ese balance entre victorias y derrotas», esgrime Alonso, que en todo caso, de momento afirma tener la suficiente confianza como para no temer por su cargo.
«Me siento muy respaldado, tengo un año más de contrato y este es un proyecto a tres años. Nunca sabes lo que pasará, pero tengo contacto fluido con la directiva, aunque es cierto que no estamos cumpliendo las expectativas y la presión está ahí porque te responsabilizas de lo que está pasando», reconoce.
Respecto al Covirán, el técnico afirma que el granadino es «uno de los mejores proyectos de la LEB y del baloncesto nacional desde hace unos años», basándose en «una ciudad de enorme tradición, con gran afición y que ha tenido la paciencia de hacer las cosas con criterio y saber hacer». Además, entiende que «este año han mantenido el bloque y los cuatro fichajes son referentes en LEBOro».
Asimismo, destaca la polivalencia del juego interior con «la referencia de Olmos, pero también la opción de jugar con dos '4' como Rubio y Bortolussi a la vez». Por último, espera un «partido muy largo y duro, por el nivel de juego e intensidad del Covirán y por cómo cargan el rebote, teniendo además una rotación muy larga en la que todos los jugadores tienen minutos». /JOSÉ PUERTAS
Los aficionados del Covirán podrán seguir con todo detalle lo que suceda mañana en Son Moix, dado que el partido ante Palma se retransmitirá por Andalucía TV. De este modo, será el segundo encuentro consecutivo de los nazaríes con las cámaras de Canal Sur como testigo, tras el derbi de la pasada semana contra el Betis. El choque podrá verse igualmente a través de la aplicación de la LaLiga TV, plataforma que televisará la segunda cita a domicilio del cuadro rojinegro, tras la de hace casi dos meses frente al Barça B (78-60).
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