Marlon Palharini recibe el título de Superliga, pero no apoyo económico. Francis Cazorla
Voleibol

Unicaja Costa de Almería, sin Champions por falta de ayudas

Solo la Diputación Provincial se ha posicionado abiertamente a prestar ayuda a un equipo que ha disputado cuatro Final Four, siendo subcampeón en la máxima competición continental

Juanjo Aguilera

Almería

Sábado, 4 de junio 2022, 22:45

La falta de apoyos económicos por parte principalmente de algunas administraciones –solo la Diputación Provincial de Almería ha mostrado su abierta colaboración– ha echado por ... tierra un gran año en Unicaja Costa de Almería. El equipo blanquiverde, ante la falta de solidez económica para dar la cara en competición europea –jugar la Champions requiere de un proyecto que implica, además de una plantilla importante, otros aspectos–, tomó a última hora del viernes la decisión, hecha pública ayer, de no participar en la máxima competición continental para la que se había ganado el puesto, tras ganar puede que el título más costoso de los últimos años.

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Los blanquiverdes, con una campaña plagada de problemas generados por el covid –llegó a perder dos partidos por no poder jugarlos–, levantaron un playoff de semifinales en el que llegaron a levantar bolas de partido o un 0-2, frente a Guaguas, en el compromiso decisivo. Su reacción valió para dejar atado el duodécimo título liguero y el trigésimo entorchado en cuanto a conquistas nacionales, además de ganarse una plaza en la máxima competición continental.

Dan la espalda

Las reuniones para competir en buena lid y dando la cara comenzaron a llevarse a cabo por parte del CV Almería, que tiene como sponsors principales a Unicaja Banco y Costa de Almería a través de la Diputación Provincial de Almería –única institución que sí ha dado un sí rotundo al apoyo económico–, tocando puertas que, como queda dicho, solo se abrieron de par en par en la institución presidida por Javier Aureliano García.

Reuniones que tenían como fin volver a Europa. El 14 de junio de 2019 Unicaja Costa de Almería retornaba tras siete temporadas en blanco en el continente, un 'hábitat' que había sido suyo durante más de dos décadas. Las 22 temporadas consecutivas en competición europea tuvieron un parón que parecía que no volvería a producirse una vez que se logró recuperar esa participación, pero con la pandemia de por medio y la cautela se prefirió aguardar una mejor oportunidad. Ahora, con el título de la Superliga Masculina de Voleibol bajo el brazo y en una posición extraordinaria en cuanto a repercusión pública y arropo de la afición, parecía el momento de volver definitivamente y por la puerta grande: la CEV Champions League.

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Sin embargo y, pese a las conversaciones y las negociaciones mantenidas hasta el límite del plazo de inscripción, que concluyó oficialmente el pasado viernes día 3 de junio, no va a poder ser. El ejercicio de responsabilidad del club, que pasa inexorablemente por tener un equilibrio presupuestario, le obliga a rehusar de su derecho deportivo ganado sobre la pista de juego tras una temporada espectacular y una final extraordinaria, culminando el logro de alzarse campeón en el Moisés Ruiz ante un público entregado.

Dura decisión

Desde el club no se oculta que tomar esta decisión ha sido muy duro y supone una frustración muy grande, «sobre todo por la ilusión que había puesta en hacerlo realidad. Es más, el principal pesar de la entidad ahorradora es no poder cumplir el deseo de su afición y Almería en general», de parte de Almería, como ha quedado demostrado.

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Según el comunicado emitido por la entidad que preside Antonio Rodríguez «no han llegado los apoyos económicos necesarios para afrontar una competición tan exigente como la Champions, que requiere de formar una plantilla larga y competitiva y de sostener una serie de gastos importantes tanto para desplazamientos como para organización de partidos». Solo la Diputación, como queda dicho, echó el pie hacia delante, por lo que «el club quiere dar las gracias públicamente y poner en valor como corresponde la predisposición de la Diputación de Almería, con su presidente, Javier Aureliano García, al frente y con su diputado de Deportes, José Antonio García, en permanente contacto mostrando el interés por las necesidades para formular la inscripción». Así, destacan que «el presidente ha cumplido con la promesa formulada al equipo cuando fue recibido en el Palacio Provincial como campeón de su apoyo al proyecto de Europa».

Veladamente se intuye que han sido otras administraciones –Ayuntamiento de Almería y Junta de Andalucía– los que no han dado en fecha la aportación necesaria. «Hacían falta otros apoyos que completaran el presupuesto necesario para no poner en peligro la viabilidad de la temporada en su conjunto. En ese sentido, Unicaja Costa de Almería sigue trabajando para formar un equipo que luche por los tres títulos nacionales de la campaña 2022/2023, siempre complicado por la innegable subida de nivel del voleibol español, a la par que apasionante. El sueño de Europa tendrá que esperar al menos un año más, asumiendo que para poder recuperarlo hay que hacer un gran papel en España».

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El conjunto almeriense señaló que «se peleará por ganarse de nuevo este derecho de participar en competición europea y, si se logra, el club intentará una vez más encontrar los apoyos para hacer posible algo que, indudablemente, beneficia a Almería».

Pese a la historia

Es la segunda vez que el club debe renunciar por el equilibrio económico de la entidad de la que, como queda dicho, son Unicaja Banco y Costa de Almería, sus principales sponsors. Ya en mayo de 2012 ocurrió lo mismo para un equipo con presencia en cuatro Final Four que debutó en competición internacional enfrentándose al Fortuna de Bonn. En la ida, celebrada en tierras germanas, ganó el entonces Cajalmería por 2-3, con parciales 8-15, 15-7, 8-15, 15-8 y 14-16. En la vuelta, disputada en el Pabellón Rafael Florido de Almería, los ahorradores, dirigidos por Antonino Conti, ganaban 3-0 (15-8, 15-4 y 15-9), el 12 de octubre de 1991.

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Y a lo largo de su larga historia, hasta que en 2012 deja de competir de forma 'cotidiana' en torneos europeos, tiene el honor de ser el primer equipo español en ganarle a un conjunto italiano –entonces casi como ahora la mejor Liga de mundo–, lo hizo en Almería por 3-2 sobre Jucker Petrarca Padova o el primero en jugar una final europea en la máxima competición –antes lo había logrado Cajasoria– y ser subcampeón de Europa, en 1998.

Antes, en 1996, llegó a la Final Four de la Recopa, en el Pabellón de La Paz y La Amistad de El Pireo, donde en semifinales cayó ante el Bayern Wuppertal, que perdió la final con Olympiakos, y en el tercer y cuarto puesto ante fue superado por el Alcom Capelle de Holanda, al que había ganado en la fase de grupos. En 2001 inauguró una nueva competición en Eregli (Turquía), en la Top Teams Cup, cayendo en semifinales frente a Espinho, para ganar a Erdemispor Eregli turco, en el tercer y cuarto puesto.

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La última participación en una Final Four se produjo en la temporada 2008/09, en la que los ahorradores, dirigidos por Carlos Carreño, sucumbieron en semifinales con Belogorie Belgorod, que ganaría la final frente a Panathinaikos, y con Bre Banca Cuneo, con el que perdería el tercer y cuarto puesto.

En todos el nombre que figuraba en el marcador o en la cartelería fue el de Almería, algo que desgraciadamente no han sabido aprovechar los que se llenan la boca para promocionar la ciudad en el exterior. Una pena.

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